Resumen semanal de los artículos de prensa de los historiadores venezolanos
En estos días, en que las grandes mayorías de Venezuela se mantienen apáticos frente al proyecto de nueva Constitución (o “reforma”), los historiadores no dejan de hablar del tema en sus artículos de prensa. De lado y lado, la ven como una decisión trascendental.
Luis Brito García con su artículo: “Cómo borrar el ALCA de la Constitución” publicado en el diario Últimas Noticias, hace una defensa del proyecto de nueva Constitución (o “reforma”) señalando que la misma permitirá una mayor protección de la economía nacional, lo cual no hace la actual. Nos dice que en la de 1999 se “contrabandea el ALCA en la Constitución”. Es por ello que transcribe los textos de los artículos correspondientes (301, 303, 313 y 316) con su reforma, y al final señala: “Defendamos los 33 artículos de la Reforma como los 33 años de la vida de Cristo. Pero si Cristo vive unos años más, a lo mejor no lo crucifican.”
En estos días, en que las grandes mayorías de Venezuela se mantienen apáticos frente al proyecto de nueva Constitución (o “reforma”), los historiadores no dejan de hablar del tema en sus artículos de prensa. De lado y lado, la ven como una decisión trascendental.
Luis Brito García con su artículo: “Cómo borrar el ALCA de la Constitución” publicado en el diario Últimas Noticias, hace una defensa del proyecto de nueva Constitución (o “reforma”) señalando que la misma permitirá una mayor protección de la economía nacional, lo cual no hace la actual. Nos dice que en la de 1999 se “contrabandea el ALCA en la Constitución”. Es por ello que transcribe los textos de los artículos correspondientes (301, 303, 313 y 316) con su reforma, y al final señala: “Defendamos los 33 artículos de la Reforma como los 33 años de la vida de Cristo. Pero si Cristo vive unos años más, a lo mejor no lo crucifican.”
En nuestro último resumen nos olvidamos del historiador padre Luis Ugalde s.j., el cual escribe quincenalmente su columna en El Nacional. Es por ello que hoy comentamos su artículo del 13 de septiembre: “¿A dónde vamos?” en el cual se refiere una vez más al terrible destino de Venezuela de seguir la acción del actual gobierno. Una frase señala el problema fundamental de nuestro país a su entender:
El gobierno se empeña en implantar el modelo cubano y similares, sociedades y economías “comunistas” centralizadas que fracasaron estrepitosamente en productividad ciudadana y económica, justamente porque el poder despojó a los ciudadanos de su productividad y usurpó para uno solo la voluntad y la iniciativa de todos. (…) Productividad hoy significa crear un compromiso y una obsesión con dos factores combinados: calidad generalizada y bien distribuida en toda la educación con niveles mundiales, y dinámica empresarial para que los egresados de esa educación-preparación productiva (económica y ciudadana) tengan oportunidades de trabajo.
Una de las cosas admirables del Padre Ugalde es que nadie le puede reprochar estar “vendido” al “imperialismo y a la oligarquía” (de por si un argumento ridículo a la hora de discutir), debido a su compromiso con los pobres es clarísimo.
Agustín Blanco Muñoz: con sus dos artículos: “Instalación formal de Venecuba”, y “Precisiones de la “fiesta electoral”” el viernes en El Universal se dedica a explicar que los llamados “enemigos” por el chavismo (los Estados Unidos y los partidos “puntofijistas”), son precisamente los que le han permitido consolidarse en el poder, y facilitar que una gran alianza “neosocialista” comience a construirse para finalmente enfrentarse a los Estados Unidos. Es así como afirma en el primer artículo:
Hay que partir del inmenso vacio-crisis que se genera desde el 27F-89. Ante las expectativas de la inmensa crisis, USA negocia en Dic.-98 con "el proyecto revolucionario" para tratar de detener el barranco. Obtuvo los mejores beneficios petroleros y comerciales. Creó el monstruo y lo aprovechó. (…) el otro agente creador del monstruo, la llamada oposición, sigue haciendo la política cuida espacios, busca diputados y presidente "unitarios y salvadores", sin siquiera advertir que no hay espacio-sociedad-país sino la República Dictatorial Integrada de Venecuba (RDIV). Su atraso, ignorancia o complicidad-negociación no pueden ser mayores.
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El viernes Antonio Sánchez García, con su artículo “Los discriminados” afirma (una vez más) que los venezolanos se encuentran ante un dilema existencial de cara a la nueva Constitución, incluyendo el chavismo dentro de los totalitarismo del siglo XX.
Imposible no considerar que en estos tiempos de discriminación, persecución y totalitarismo, todos nosotros, los demócratas venezolanos, sin importar nuestra raza, nuestros credos o nuestra religión, somos, metafóricamente, judíos. Ya ingresamos en las listas malditas del régimen y si no hacemos nada terminaremos alimentando su insaciable voracidad homicida. Detrás del sistema que pretende imponerse mediante este golpe constitucional babea el odio criminal de la intolerancia, el fétido humor de la maldad y el hálito de la muerte. Oponerse a él con todas nuestras fuerzas es no sólo una obligación moral: es un imperativo de sobrevivencia.
El sábado Elías Pino Iturrieta (“el sol presidencial” en El Universal) se mantiene fiel a su denuncia sobre los intentos de manipular la historia por parte del chavismo, y en especial el deseo del diputado Carlos Escarrá de comparar la propuesta de presidencia vitalicia de Bolívar en su proyecto de Constitución de Bolivia, con el actual proyecto de Chávez.
Sólo la falta de juicio aconsejaría el examen de una fuente de 1825 para justificar una situación que ocurre en 2007, después de un proceso de decantaciones y rectificaciones que impide la posibilidad razonable de una ilación. Sólo la indigencia intelectual establecería vínculos entre la etapa final de la Independencia suramericana y la oscurana chavista de la actualidad.
El mensaje de 1825 ante los diputados de Bolivia encendió con harto fundamento la mecha de las disidencias, fomentó los nacionalismos de Nueva Granada, Quito y Venezuela, alertó a los cuarteles y alimentó los ímpetus liberales gracias a los cuales culminó en desastre lo que se anunciaba como una utopía transnacional bajo el mando del Libertador. (…)¿Acaso no pueden apreciarse el documento sobre el poder vitalicio y las reacciones negativas que provocó hasta conducir a la destrucción de la Gran Colombia, como un vaticinio del descalabro de su jefe? Desafortunado debut del catedrático Escarrá en el terreno de la historiografía, perdido para el raciocinio y ganado por la cortesanía.
El domingo Simón Alberto Consalvi (“La Constitución, momia egipcia” en El Nacional) desarrolla el mismo tema, pero advirtiendo que la Constitución vigente no se ha aplicado; y advierte:
La reforma le da luz verde a la politización. A un ejército pretoriano. Somos tan ilusos que nos escandalizamos por la "creación" de las Milicias Populares Bolivarianas. ¿Pero, no están activas, con más de medio millón de reservistas, desde hace alrededor de tres años? Si la del 99 es una momia egipcia, ¿quién mete la mano en el fuego por la Constitución prêt-à-porter de este enigmático 2007, cuando la reelección indefinida será la "conquista" que se defenderá a capa y espada? En 200 años de historia republicana, por primera vez tendremos una Constitución que consagra la presidencia vitalicia
Manuel Caballero escribe “El más corrompído de la historia” en El Universal; usando la tesis del escritor yugoslavo de la época de Tito: Milovan Djilas, el cual sostuvo que la mayor corrupción del socialismo es pretender la utopía de una sociedad sin clases, y especialmente creer que esto es posible.
En alguno de sus escritos, Milovan Djilas se refería a la corrupción como la viga maestra sobre la cual se sostenía el sistema. Pero no se trataba del robo de los dineros públicos, de la "comisión", el soborno y la "mordida", que al final eran en cierto modo males menores. No, decía Djilas: la peor corrupción posible no es el ladronismo, sino la fascinación que la tiranía ejerce sobre aquellos que la sufren.
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