Saturday, August 10, 2013

Richard Gluzki (1925-2004): un aviador polaco-venezolano en la Segunda Guerra Mundial (I)

Autor: Clemente Balladares



En el ámbito turístico de los años 60s y 70s se mencionaba con fuerza al Sr. Richard Gluzki. El era dueño de una agencia de viajes y promotor de la Aerolínea Viasa y Air France. Lo que la mayoría no conoce es que Ricardo, como decía su pasaporte venezolano, era oriundo de Polonia y fue un veterano de la Segunda Guerra Mundial.

Ryzsard nació en el pueblo polaco de Zarki el 18 de abril de 1916. Su padre era un gran productor maderero y criador de ganado. Desde muy joven Ryzsard fue educado en casa por una institutriz francesa junto a sus hermanos. De adolescente la familia se mudó a Varsovia en 1925 y en el liceo sucedió algo que perfilaría su carácter emprendedor. Junto a un amigo se escapó de casa llevando consigo las joyas de su madre. Su padre lo halló algo lejos de casa y cuando su madre le preguntó qué es lo que pretendía, el hijo respondió: "¡Buscar aventuras!". Al repreguntar: "¿Y qué ibas a hacer con las joyas?". Ryszard contestó: "Venderlas si fuese necesario".

Luego de estas primeras correrías, entro antes de la mayoría de edad al cuerpo de exploradores polacos. Allí un amigo lo convenció de ingresar en la academia militar de su país. El padre aprobó la idea, pero sugirió que en lugar del ejército escogiese la caballería. Ryszard aceptó en similar recuerdo de sus años de equitación en la granja familiar, posteriormente aprobó los exámenes en agosto de 1934. Su primer encuentro con la sangre lo sufrió en la propia academia a sus dieciocho años donde un gran amigo suyo se suicidó antes de enfrentar la rigidez de su padre por un fracaso de la escolaridad militar. En la escuela también conoció su primer amor, la esposa del conde Jan Szembek... Al poco tiempo este affaire no prosperó.

En agosto de 1939, justo un mes antes de comenzar la invasión alemana a Polonia, Ryzsard se encontró con su hermano mayor Eric para salir a una cita romántica junto con dos bellas jóvenes. Luego de un espléndido almuerzo acompañado de champagne, se dio un momento de tensión al conversar acerca de la posibilidad de conflicto con los germanos. Para aliviar el tema el hermano menor propuso salir al jardín del restaurante donde luego, cada pareja tuvo una despedida amorosa previa a lo que enfrentarían esa nación y el planeta entero. Esa sería la última ocasión en la cual Ryzsard vería a Eric y a su rubia compañera de nombre Irene.


(Continúa mañana).
 

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