Efemérides
Testimonios: opinión personal
No puedo dejar de recordar un día tan glorioso para los que amamos la libertad y la diginidad de toda persona humana, el día en que se inició la caída de esa pesadilla que se llamó el “comunismo real”. Lo presencié por la tele cuando tenía 19 años, y me sentí feliz por vivir la historia. En el presente, recordarlo me llena de esperanzas de que algún día en Venezuela también caerá “el muro” que hoy los comunistas de mi patria están construyendo (el muro hoy es la “reforma”). Yo veo las fotos de los berlineses celebrando y me imagino que son los demócratas de mi país llenos de alegría cuando llegue el gran momento: ¡porque llegará!
No piense que no tiene fuerzas para martillar, o que no posee los instrumentos para derribar el muro, no piense mucho menos que el muro es indestructible o es muy alto y ancho. El muro, tarde o temprano caerá, si todos empujamos en una sola dirección, la dirección de la UNIDAD por la LIBERTAD Y LA DEMOCRACIA.
Testimonios: opinión personal
No puedo dejar de recordar un día tan glorioso para los que amamos la libertad y la diginidad de toda persona humana, el día en que se inició la caída de esa pesadilla que se llamó el “comunismo real”. Lo presencié por la tele cuando tenía 19 años, y me sentí feliz por vivir la historia. En el presente, recordarlo me llena de esperanzas de que algún día en Venezuela también caerá “el muro” que hoy los comunistas de mi patria están construyendo (el muro hoy es la “reforma”). Yo veo las fotos de los berlineses celebrando y me imagino que son los demócratas de mi país llenos de alegría cuando llegue el gran momento: ¡porque llegará!
No piense que no tiene fuerzas para martillar, o que no posee los instrumentos para derribar el muro, no piense mucho menos que el muro es indestructible o es muy alto y ancho. El muro, tarde o temprano caerá, si todos empujamos en una sola dirección, la dirección de la UNIDAD por la LIBERTAD Y LA DEMOCRACIA.
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