Segunda Guerra Mundial
Me pregunto, leyendo la traducción de Larry Nieves sobre un artículo de Ralph Raico en contra de la justificación del lanzamiento de las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagazaki si estos temas se pueden discutir después que todo ha sucedido. Obviamente que se puede, pero yo me pregunto si no se es injusto con los actores. Porque hay que preguntarse: ¿qué hubiéramos hecho de estar “en los zapatos” de los decisores? ¿los actores poseían toda la información que nosotros disponemos ahora y por la cual podemos analizar con total calma y desde un tiempo histórico distinto la moralidad de las decisiones tomadas y no por tomar?. Ciertamente es injustificable el asesinato que no sea en defensa propia, el lanzamiento de bombas atómicas sobre civiles; pero siempre me he preguntado que las personas piensan mucho en Hiroshima y Nagazaki pero se olvidan de la destrucciòn de la mayor parte de las ciudades importantes del Japón por bombas incendiarias que generaron mucho màs muertes que las bombas atómicas; me parece de una gran hipocresía (aclaro que no me refiero a Larry Nieves porque él ha comentado de estas casos).
Puede sonar duro pero el lanzar las bombas atómicas para mí fue el continuar la política de arrasar con las ciudades japonesas, y es por ello que la bomba atómica no hace diferencia en el sentido de la matanza, en el dolor, en el sufrimiento; y en especial de lo que se venía haciendo para ganar la guerra. Claro, aunque las bombas atómicas generaron el mismo dolor que las incendiarias, ciertamente causaron un impacto que llevó al final de la guerra (quizás fueron los dos impactos: la bomba y la invasión rusa, pero ¿acaso los soviéticos no se apresuraron a invadir al ver la bomba?); y otra cosa: ¿no se han preguntado por las vidas japonesas que se salvaron? esas que se iban a ocasionar con la invasión norteamericana. Y otro tema importantísimo: ¿acaso la URSS y los EEUU se cuidaron más de usar la bomba atómica en la Guerra fría por el ejemplo de muerte y dolor que generó Hiroshima y Nagazaki?. Es terrible decir que las vidas que se perdieron sirvieron para salvar otras, pero quizás fue así, y el terror a la destrucción masiva por uso de bombas atómicas era más palpable por el ejemplo del martirio de estas dos ciudades; a diferencia si esto no hubiera ocurrido
Es demasiado difícil discutir estos temas y juzgar a los decisores. Algo de esto se habla en un documental hecho por el secretario de defensa de Kennedy y Johnson: Robert McNamara, llamado “La niebla de la guerra” (The fog of war); en el mismo se analizan los problemas de la toma de decisiones en un ambiente de conflicto militar. El tema es la búsqueda de la reducción de los impactos de toda guerra; de los errores que llenan de dolor a hombres y mujeres tan humanos y dignos como ustedes y yo.
Por último, me gustaría dejar una reflexión. De haber ganado los japoneses y los alemanes la guerra: ¿se hubieran hecho estas preguntas sobre la justificación del uso del arma atómica; y en su caso: de los campos de concentración y exterminio y otras atrocidades que estos cometieron?. Sólo es un pregunta, que no por ello justifica el excesivo uso de la fuerza al defendernos de nuestros agresores en una guerra; pero que nos hace, de algún modo, en ponernos “en los zapatos” (lo repito una vez más) de los que tuvieron que tomar decisiones complicadas en tiempos mucho más complicados aún.
En mi opinión, es bueno discutir estos temas, siempre y cuando tengan la meta de regular las guerras y mejorar nuestra capacidad moral en la toma de decisiones. Quizás el sólo hecho de intentarlo reduzca las muertes y el sufrimiento, quizás…sólo es un quizás. Lo que no estoy de acuerdo es en discutirlo para juzgar a los decisores desde tiempos totalmente distintos a los suyos, con un caudal de datos que estos no poseyeron, y sin la presión de enfrentarnos a un enemigo como los totalitarismos nazi o japonés. No podemos justificar el asesinato de inocentes; pero por mi parte estoy agradecido del valor y el coraje de los pueblos aliados y sus líderes para enfrentar la amenaza que representó la Alemania Nazi y el Japón de su época. Sin su coraje no podriamos estar discutiendo estos temas.
Me pregunto, leyendo la traducción de Larry Nieves sobre un artículo de Ralph Raico en contra de la justificación del lanzamiento de las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagazaki si estos temas se pueden discutir después que todo ha sucedido. Obviamente que se puede, pero yo me pregunto si no se es injusto con los actores. Porque hay que preguntarse: ¿qué hubiéramos hecho de estar “en los zapatos” de los decisores? ¿los actores poseían toda la información que nosotros disponemos ahora y por la cual podemos analizar con total calma y desde un tiempo histórico distinto la moralidad de las decisiones tomadas y no por tomar?. Ciertamente es injustificable el asesinato que no sea en defensa propia, el lanzamiento de bombas atómicas sobre civiles; pero siempre me he preguntado que las personas piensan mucho en Hiroshima y Nagazaki pero se olvidan de la destrucciòn de la mayor parte de las ciudades importantes del Japón por bombas incendiarias que generaron mucho màs muertes que las bombas atómicas; me parece de una gran hipocresía (aclaro que no me refiero a Larry Nieves porque él ha comentado de estas casos).
Puede sonar duro pero el lanzar las bombas atómicas para mí fue el continuar la política de arrasar con las ciudades japonesas, y es por ello que la bomba atómica no hace diferencia en el sentido de la matanza, en el dolor, en el sufrimiento; y en especial de lo que se venía haciendo para ganar la guerra. Claro, aunque las bombas atómicas generaron el mismo dolor que las incendiarias, ciertamente causaron un impacto que llevó al final de la guerra (quizás fueron los dos impactos: la bomba y la invasión rusa, pero ¿acaso los soviéticos no se apresuraron a invadir al ver la bomba?); y otra cosa: ¿no se han preguntado por las vidas japonesas que se salvaron? esas que se iban a ocasionar con la invasión norteamericana. Y otro tema importantísimo: ¿acaso la URSS y los EEUU se cuidaron más de usar la bomba atómica en la Guerra fría por el ejemplo de muerte y dolor que generó Hiroshima y Nagazaki?. Es terrible decir que las vidas que se perdieron sirvieron para salvar otras, pero quizás fue así, y el terror a la destrucción masiva por uso de bombas atómicas era más palpable por el ejemplo del martirio de estas dos ciudades; a diferencia si esto no hubiera ocurrido
Es demasiado difícil discutir estos temas y juzgar a los decisores. Algo de esto se habla en un documental hecho por el secretario de defensa de Kennedy y Johnson: Robert McNamara, llamado “La niebla de la guerra” (The fog of war); en el mismo se analizan los problemas de la toma de decisiones en un ambiente de conflicto militar. El tema es la búsqueda de la reducción de los impactos de toda guerra; de los errores que llenan de dolor a hombres y mujeres tan humanos y dignos como ustedes y yo.
Por último, me gustaría dejar una reflexión. De haber ganado los japoneses y los alemanes la guerra: ¿se hubieran hecho estas preguntas sobre la justificación del uso del arma atómica; y en su caso: de los campos de concentración y exterminio y otras atrocidades que estos cometieron?. Sólo es un pregunta, que no por ello justifica el excesivo uso de la fuerza al defendernos de nuestros agresores en una guerra; pero que nos hace, de algún modo, en ponernos “en los zapatos” (lo repito una vez más) de los que tuvieron que tomar decisiones complicadas en tiempos mucho más complicados aún.
En mi opinión, es bueno discutir estos temas, siempre y cuando tengan la meta de regular las guerras y mejorar nuestra capacidad moral en la toma de decisiones. Quizás el sólo hecho de intentarlo reduzca las muertes y el sufrimiento, quizás…sólo es un quizás. Lo que no estoy de acuerdo es en discutirlo para juzgar a los decisores desde tiempos totalmente distintos a los suyos, con un caudal de datos que estos no poseyeron, y sin la presión de enfrentarnos a un enemigo como los totalitarismos nazi o japonés. No podemos justificar el asesinato de inocentes; pero por mi parte estoy agradecido del valor y el coraje de los pueblos aliados y sus líderes para enfrentar la amenaza que representó la Alemania Nazi y el Japón de su época. Sin su coraje no podriamos estar discutiendo estos temas.
5 comments:
buenisimo lo que tienen me ayudo mucho en una tarea
gracias!! :D
De nada, para eso estamos!. Espero que salgas bien y JAMÁS OLVIDES CITAR LA FUENTE!!! jamás hagas "copy-paste" sin citar la fuente, no es malo hacer muchos "copy-paste" siempre y cuando se citen y sepamos ordenar toda la información.
saludos
Profeballa
Había una alternativa: Un grupo de científicos del Proyecto Manhattan esxribió una carta para Truman avalada por Oppenheimer donde se proponía no usar la bomba contra objetivos civiles sino que se convocara a los japoneses a una demostración inocua pero que mostrará los efectos descastadores de la nueva arma si se arrojaba sobre una ciudad muy poblada y darle allí mismo un ultimatun de rendición: Teller uno de los más grandes científicos atómico pero un coño de madre judiío que ansias de venganza contra Hitler, recomendó lo contrario a pesar de que ya Alemania se había rendido y Hilter estaba hecho cenizas (aunque el había trabajado para que la bomba se usara contra los alemanes y después fue el padre de la bomba de hidrógeno) y aconsejó a políticos y militares para que se usase: porque la demostración podía fallar y quedar en ridículo o porque los japoneses avisados evacuaran sus ciudades y no se rindieran. Coño madres hay en todas los grupos humanos.
Lo felicito por su blog
ta bueno el blog, pero el año,no lo publican??
..ok,no importa felicidades!!!
El año que lanzaron la bomba?. El 6 y el 9 de agosto de 1945 respectivamente.
Saludos
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