viernes, junio 20, 2008
Con Portugal en el corazón (los portugueses en la historia de Venezuela)
"Obligación de esos venezolanos es llevar la moral del hogar que los ha formado"...
Portugueses en Venezuela
La población de El Valle fue bautizada así en recuerdo del lusitano Cortés Richo, compañero de Fajardo. Juan Fernando de León fue el portugués que fundó a Guanare y el río Portuguesa, según la leyenda, se llama así porque la tradición señala que allí se ahogó una portuguesa. Es bueno recordar que no por casualidad tenemos un estado con el nombre de Portuguesa.
Portugal fue la primera nación que reconoció a la Venezuela independiente. La familia venezolana-portuguesa, o portuguesa-venezolana ha crecido mucho.
La formación de estas familias es un ejemplo para todos los venezolanos. La solidaridad entre los portugueses es digna de imitar. Es muy frecuente que el venezolano hijo de portugueses esté presente siempre a la hora de la responsabilidad doméstica. El médico hijo del portugués, si el padre necesita ayuda en el abasto, lo ayuda. Lo mismo ocurre con el ingeniero, cuyos padres tienen un restaurante. Nadie le saca el cuerpo al trabajo de los mayores y están orgullosos de la pobreza que con dignidad llevaron los abuelos cuando vinieron a Venezuela. Lo primero que los portugueses cuentan a sus hijos venezolanos es la situación difícil que vivieron cuando arribaron a La Guaira.
Pienso yo, entonces, que obligación de esos venezolanos, retoños de los portugueses, italianos y españoles, es llevar la moral decente del hogar que los ha formado a la vida pública de este país.
Necesitamos jóvenes, en todas las áreas, que con su formación familiar contribuyan a una nueva mentalidad de honestidad y dignidad en la vida venezolana.
Si "hemos fabricado" imponente reinas de belleza, ¿por qué no formar también auténticos estadistas con esa mentalidad de la familia a quien le ha costado mucho lograr lo que tiene? Estos muchachos hijos de portugueses, italianos y españoles, deben recordar que si sus padres y abuelos no le tuvieron miedo al hambre, a la soledad y al desprecio, ellos tienen el deber y el derecho de servir a una Venezuela democrática y justa, sin adulancia y con inteligencia, aportando conocimiento sin tener miedo a nada, ni nadie. Que Dios y la Virgen nos ayuden... A fabricar una nueva Venezuela con el apoyo de quienes llegaron sin nada y ahora tienen lo suficiente para una vida digna y honesta.
domingo, junio 15, 2008
Según leo: dañan el Panteón Nacional y también me cuentan...
Que la Casa Amarilla la han destrozado con los arreglos, pero es sólo un chisme, no lo he confirmado.
Acà les dejo la noticia del Panteón Nacional, prometo pasar y ver, trayendo fotos. La noticia la tomé de Noticias 24.
Noticias24.- El héroe nacido en Curpa, Estado Portuguesa, que dirigiera los destinos de Venezuela en tres oportunidades, y quien fuera reconocido por su valía como militar aguerrido pero civilista, ha sido objeto de “la máxima afrenta” que haya sufrido ocupante alguno del Panteón Nacional.
Sobre su sarcófago, la Dirección del Ceremonial y Acervo Histórico de la Nación ha colocado un aire acondicionado para refrescar la estancia y quizá mostrar su desprecio al Prócer, objeto de la inquina personal del Presidente Chávez por “traicionar a Bolívar”.
Carlos Alarico Gómez lo reseña esta mañana en el diario 2001, y explica que el héroe de Las Queseras nunca fue enemigo de El Libertador, Simón Bolívar.
El héroe de Las Queseras cumplió 218 años de nacido el 13 de junio de esta semana y como reconocimiento a sus invalorables servicios a la patria, el actual Gobierno ha profanado su tumba y, aún más, ha procedido a mutilar parte del Panteón Nacional, uno de los bienes arquitectónicos más sagrados del patrimonio histórico del pueblo venezolano, edificado por José Domingo del Sacramento Infante y puesto en funcionamiento en 1783. El hecho se produjo con el injustificado objetivo de colocar un inmenso aparato de aire acondicionado de seis metros de largo para hacer más grata la presencia a los visitantes que acuden a diario al sagrado recinto. La motivación es, desde luego, inaceptable. Se trata de un camposanto destinado al eterno reposo de los venezolanos que han prestado grandes servicios a la nación. Por lo tanto, no es un lugar para ir a disfrutar de aire acondicionado, sino para reflexionar, para rezar, para rendir tributo a los héroes civiles y militares a los que debemos nuestra nacionalidad.
El inmenso aparato fue colocado sobre el sarcófago en el que descansan los restos de José Antonio Páez, obra del afamado arquitecto José Pizzo. Según se ha podido establecer, el ente público responsable de este despropósito es la Dirección del Ceremonial y Acervo Histórico de la Nación, dependencia del despacho de Relaciones Interiores y Justicia. El hecho es un crimen contra la historia y constituye el máximo irrespeto del actual Gobierno contra la figura señera de Páez.
Vía Diario 2001 Fotocrédito Don Perucho en FlickrLo acontecido hiere lo más profundo de la venezolanidad. No es posible pensar que los responsables de tamaño desafuero ignoren que José Antonio Páez es el militar más destacado de todos cuantos han existido y posiblemente no habrá en el futuro ningún otro que pueda siquiera acercarse a su impecable hoja de servicios. Grande y generoso en el triunfo, supo aplicar toda su sagacidad e innata inteligencia en el momento de enfrentarse a la dura realidad de la derrota. Fue también un estadista eminente y un gran americanista, considerado por la inmensa mayoría de los historiadores como uno de los venezolanos más destacados de todos los tiempos. Sobresalió en variadas facetas del quehacer humano, especialmente al convertirse en el fundador y primer presidente de la República de Venezuela, por voluntad del pueblo venezolano, de acuerdo al proceso eleccionario que desembocó en la Convención de Valencia y en la promulgación de la Constitución de 1830.
sábado, junio 14, 2008
Efemérides: 1777: natalicio del realista liberal Andrés Level de Goda, todo un personaje
1777: En Cumaná (Edo. Sucre) nace el jefe realistas, periodista y político Andrés Level de Goda. Fue defensor de la monarquía española durante la guerra de independencia de Venezuela, fundador de los periódicos caraqueños Lo que Ustedes Quieran y Verdad que fueron los voceros del movimiento La Cosiata que separo a Venezuela de la Gran Colombia, rector del Colegio Nacional de Cumaná y adepto de la Revolución de Las Reformas en 1835.
Acá les dejo su biografía en el Diccionario de Historia de Venezuela de la Fundaciòn Polar.
Magistrado, abogado, político y periodista. Apoyó la causa realista durante la Guerra de la Independencia, y posteriormente participó en la vida política de la República. Hijo de Andrés Level Alen y de Melchora Limardo. Su padre poseía una hacienda en la región de Paria cercana a la isla de Trinidad. En diciembre de 1796, inició estudios en la Universidad de Caracas y se graduó de licenciado en derecho civil en 1801. Contrajo matrimonio en Cumaná con María Ascensión Bermúdez, hermana del más tarde general José Francisco Bermúdez. Se domicilió en la isla de Trinidad antes de 1802 y actuó como asesor jurídico del Ayuntamiento de Puerto España. En mayo de 1810, regresó a Venezuela y recibió de la Junta de Cumaná la misión de imprimir en Trinidad una contestación a la Junta de Caracas, en la que aseguraba la adhesión de la primera a la defensa de los derechos de Fernando VII. Sin embargo, al surgir el enfrentamiento de las Juntas venezolanas con la Regencia de España, Level de Goda salió de su ciudad natal y decidió seguir prestando sus servicios al gobierno colonial británico en Trinidad; al mismo tiempo, conspiraba desde allí contra las autoridades republicanas de Cumaná. Cuando en mayo de 1811, el coronel Santiago Mariño fue a Trinidad, enviado por las autoridades cumanesas, para protestar ante el gobernador de esa colonia, Thomas Hyslop, por las actividades contrarrevolucionarias de Level de Goda, se produjo un enfrentamiento verbal entre éste y Mariño en presencia de los funcionarios ingleses. Level de Goda fue suspendido en sus funciones y se le dio la ciudad de Puerto España por cárcel. Al caer la Primera República, a mediados de 1812, volvió a Venezuela y se estableció en una hacienda que poseía en la región del golfo Triste. A fines de ese año, fue nombrado por las Cortes de Cádiz gobernador político de Cumaná, cargo que empezó a ejercer en marzo de 1813. Cuando, en julio de 1813, el ejército republicano del general Mariño se presentó ante Cumaná, contribuyó a la defensa de la ciudad, al lado de los jefes militares realistas Eusebio Antoñanzas y Juan Nepomuceno Quero, hasta que ésta fue evacuada el 2 de agosto. Logró huir a La Guaira, pero la fragata en la cual viajaba su esposa fue apresada por los republicanos y conducida a Cumaná. Level de Goda se dirigió entonces a Puerto Rico (septiembre 1813); de allí pasó a España y obtuvo en Madrid los doctorados en derecho civil y canónico. En 1815 con el cargo de fiscal togado de la Real Hacienda, se hallaba de vuelta a Caracas, donde tuvo varios choques con el entonces gobernador y capitán general Salvador de Moxó, pues éste, cumpliendo una disposición del general en jefe, Pablo Morillo, se negaba a reinstalar la Audiencia y había creado en su lugar varios tribunales especiales. El 4 de noviembre de ese año, Level de Goda dirigió a Fernando VII un Memorial donde señalaba los inconvenientes causados por la suspensión de aquel cuerpo. Ante la oposición de Level de Goda, Moxó lo mandó confinado a Puerto Cabello a fines de diciembre de 1815. Finalmente, las autoridades de Madrid ordenaron que la Audiencia fuese reinstalada, con lo cual concluyó el confinamiento de Level de Goda. En febrero de 1818, al acercarse a Caracas las tropas republicanas, Level de Goda mandó quemar numerosos expedientes de las causas de infidencia existentes en el archivo de la Real Audiencia, a fin de proteger a quienes figuraban en ellos como acusadores de los republicanos. En sus Memorias, afirmó luego que también había protegido a patriotas, entre otros, al sacerdote coriano Mariano de Talavera y Garcés. En 1819, propuso a la Audiencia que los republicanos fuesen juzgados de acuerdo con el derecho de gentes, y no como súbditos rebeldes sometidos al derecho penal, pero no tuvo éxito; el 5 de diciembre de ese año dirigió desde Caracas otro Memorial a Fernando VII donde pedía la adopción de aquella medida, manifestando que la lucha a mano armada por la independencia no era un delito de traición y lesa majestad. En 1820, cuando triunfó en España el movimiento liberal de Rafael del Riego y fue jurada de nuevo en Caracas la Constitución de Cádiz, Level de Goda fue partidario de ésta y sin dejar de ser monárquico, se enfrentó a la autoridad del general Pablo Morillo y al parecer, fue amenazado de muerte por un edecán del mismo Morillo, lo cual le indujo a pedir pasaporte para ir a España. En Madrid colaboró a mediados de 1821 con José Rafael Revenga y Tiburcio Echeverría, emisarios de Bolívar, quienes habían ido a tratar de paz con las autoridades españolas; pero las negociaciones quedaron rotas al conocerse en la Península la noticia de la batalla de Carabobo. Desengañado de la política de España, Level de Goda salió de Madrid el 1 de noviembre de 1821 hacia Burdeos. A fines del mismo mes, escribió a Fernando VII una carta en la cual criticaba la política que había seguido Morillo en América y renunciaba a su cargo de fiscal togado. Poco después, en 1822, José Domingo Díaz publicó en Madrid un violento ataque contra él, titulado Epítome de la vida política de don Andrés Level de Goda. Después de haber permanecido durante varios años (1822-1825) residenciado en la isla de Saint Thomas, en marzo de 1825, totalmente desligado del servicio de la monarquía, llegó Level de Goda a Puerto Cabello, donde se estableció y se encargó (mayo 1825) de la redacción del periódico El Vigía de Puerto Cabello. A fines de ese año o comienzos de 1826, se trasladó a Caracas. En marzo de este último año participó en la polémica político-religiosa de la «Serpiente de Moisés» con un folleto titulado Cartas de un alemán a su Excelencia el Vicepresidente de la República de Colombia, donde criticaba a los papas y al clero en general. Al estallar, a fines de abril, la revolución de La Cosiata, Level de Goda se adhirió a ella y redactó, a partir de junio de 1826, el periódico titulado Lo que ustedes quieran y, al parecer, también otra publicación llamada Verdad. Figuró entonces entre los principales partidarios de la separación de Venezuela de la Gran Colombia. A fines de agosto de 1826 el comandante de armas de Caracas, coronel Felipe Macero, decidió separarse de la obediencia al general Páez y de la causa de La Cosiata, y marchó a Barcelona con el batallón Apure, llevándose preso a Level de Goda; en octubre éste se hallaba en Barcelona sometido a vigilancia, pero cuando la rebelión se extendió al oriente y Mariño fue a Cumaná en noviembre, se convirtió en su asesor político. Después de la llegada de Bolívar, acompañó a Mariño a Caracas y durante los primeros meses de 1827, cumplió funciones de apoderado legal para recuperar una hacienda propiedad de Mariño, lo cual se logró por disposición del Libertador. El 11 de agosto de 1827 fue arrestado en Caracas por orden del general Lino de Clemente, jefe de la Alta Policía, enviado a La Guaira y expulsado a Curazao. Una vez consumada la separación de Venezuela en 1830, regresó al país y participó activamente a la vida pública nacional. En 1832, fue electo miembro suplente de la Cámara de Representantes por Cumaná; al año siguiente, juez interino en la Corte Superior de oriente, de la cual pasó en 1834, a ser su primer presidente. Durante el desempeño de este cargo, tuvo un enfrentamiento con el gobernador de la provincia de Cumaná, coronel Eduardo Stopford, a raíz de las elecciones de ese año, por lo que fue acusado de mal desempeño en sus funciones y de apoyar una rebelión contra el gobierno provincial. En el mismo año, fue nombrado rector del Colegio Nacional de Cumaná. En julio de 1835, al estallar la Revolución de las Reformas, fue uno de sus dirigentes en Cumaná, desde donde viajó a Caracas para ponerse de acuerdo con el general Mariño; pero, al desembarcar el 5 de agosto en La Guaira, fue arrestado por las fuerzas constitucionales que ya dominaban la situación. Sufrió más de un año de prisión, fue juzgado como conspirador y condenado al exilio, aunque intentó defenderse con sus folletos Léase y digan y El 5 de agosto, publicados ambos en 1836. Abandonó nuevamente a Venezuela trasladándose a Nueva Granada, donde permaneció exiliado durante casi una década. A su regreso, pasó los últimos años de su vida alejado de la política activa, redactando sus Memorias (1851-1852). Falleció en su casa de Caracas, y no en Maiquetía, como se creía, tras un ataque que le privó del habla. (Imagen).
1800 Alejandro de Humboldt y Aymé Bonplant llegan a Angostura. Humboldt, que recorre los ríos Orinoco, Atabapo, Caroní, y Barima hasta el río Negro, observa que Guayana es la provincia más remota de la América española.
1813 Bolívar llega a Trujillo en el inicio de su Campaña Admirable.
1819 Bolívar llega con su ejército a la población de Tame, y se encontró a Santander debidamente organizado con 1.200 hombres, y arenga a las tropas: “Pretendo pasar el Páramo de Pisba, La empresa es grandiosa. Allí morirán los caballos, se pasará hambre y frío y la mitad de nosotros morirá”.
1936 Muere Antonio José Torrealba, escritor y poeta, quien nació en Cunaviche en 1883.Se presume que hizo entrega de importante material de todas sus vivencias del llano a Don Rómulo Gallegos que le inspiró para escribir la novela “Doña Bárbara”.
1945: Se firma el primer contrato colectivo de la industria petrolera, uno de los mayores logros de Medina Angarita en materia laboral.
Historiador venezolano (Elías Pino Iturrieta) opina sobre Chávez y sus indecisiones
Artículos de opinión de los historiadores venezolanos
Les dejo acá el artículo semanal del historiador Elías Pino Iturrieta que publica todos los sábados en El Universal.
Los peligros del maromero
Cambia de parecer en asuntos primordiales para su entendimiento de la autoridad
En los recientes días Chávez ha usado el retroceso con una asiduidad que jamás le habíamos observado. Se muestra como un mandatario vacilante, en contraste con el énfasis acostumbrado de su discurso y con el empeño en imponer decisiones contra la voluntad popular. Produce curiosidad ese hombre a quien apreciamos hoy como cautivo de las cavilaciones, no en balde es el mismo sordo que se ha fijado como meta el desconocimiento de su derrota el 2 de diciembre, el mismo ciego en cuyas manos se levanta con terquedad la bandera de un socialismo frente al cual reaccionaron negativamente los electores. ¿Se volvió otro o se partió en dos fragmentos opuestos, como pasa en ciertas novelas? Nadie puede ofrecer una explicación de la metamorfosis porque no existe, porque no hay fracturas en el conjunto homogéneo de un individuo que ha asumido la acción de gobernar sin reconocer la existencia del prójimo. En lugar de negar la esencia de un autoritarismo personal, la reiteración de tantas dudas conduce necesariamente a sus entrañas para dejar testimonio de la inconsistencia que lo caracteriza.
Detengámonos en los pasos desandados. Luego de negar la posibilidad del aumento de los pasajes, unas horas de paro de transportistas bastaron para que el Gobierno concediera el crecimiento de las tarifas negado antes en beneficio de los usuarios. Después de la cascada de insultos contra el imperialismo, el comandante anunció el deseo de tratar en términos expeditos con la administración próxima de Estados Unidos, demócrata o republicana. A poco se ocupó de criticar con dureza la Ley de Inteligencia y Contrainteligencia, que había anunciado como un producto meditado y benévolo. Pese a las alabanzas de la víspera, terminó por echarla al depósito de los desechos sin siquiera parpadear. Por último le tocó el turno a las FARC, cuyas fechorías ha acompañado durante nueve años de connivencia. Iluminado por una sorpresiva linterna, de golpe descubrió que en América Latina había pasado la época de los movimientos guerrilleros. De allí la petición que remitiera a los huérfanos de Marulanda, insólita en atención a los antecedentes de intimidad, para que cesaran su actividad en Colombia. Sólo el acuerdo con los transportistas se puede considerar como el remiendo de una coyuntura. El resto de las reculadas toca aspectos esenciales para el "pensamiento" oficial: la batalla contra fuerzas tenebrosas del Norte, el cercenamiento de los derechos individuales en beneficio de una mandonería y el fomento de la desestabilización en el vecindario. Una pirueta sin alarde, en suma, a la cual sobrevinieron tres saltos mortales desde el trapecio sin la protección de la red.
Uno se debe preguntar por las causas de las maromas, apremiantes sin duda, para quedarse obligatoriamente en el campo de las conjeturas. Uno puede pensar en la amenaza de las computadoras de Raúl Reyes, en la proximidad de noticias escandalosas en torno a un maletín repleto de dólares, en una elección de gobernadores rodeada de pronósticos sombríos y en la repulsa generalizada que provoca una conducta cada vez más arbitraria, pero apenas por jugar con la imaginación. Sólo el maromero conoce el motivo de sus cabriolas, la razón de sus aventuradas contorsiones. Hace los movimientos sin ofrecer explicaciones, como si no concernieran a sus gobernados. Cambia de parecer en asuntos primordiales para su entendimiento de la autoridad, sin detenerse a pensar en el apoyo veloz y automático que ha recibido de los áulicos. El argumento para deshacerse de la Ley de Inteligencia que había anunciado con bombos y platillos, fue patético en la pista del circo desacostumbrada a brincos capaces de conducir a la muerte. Dijo que no podía defender lo indefendible, sin miramientos para el equipo que redactó la norma, ni para el vuelo de su mano izquierda firmando el Decreto, ni para guerreros diligentes como Escarrá y Díaz Rangel, quienes clamaban por los méritos del espionaje mientras su voluble patrón preparaba el viaje del instrumento legal hacia el cementerio de los angelitos.
En uno de sus artículos recientes, tratando de despejar el secreto de unas volteretas tan apretadas hablaba Oswaldo Barreto de un dictador inhábil. Por allí pueden ir los tiros de una explicación plausible, si consideramos cómo los vaivenes alejan por completo al incompetente mandón del estereotipo de revolución al que se había aferrado y de las actitudes a través de las cuales se mercadeaba como líder revolucionario. La inhabilidad lo puede conducir a movimientos de negación y transacción debido a los cuales dejará de ser lo que ha sido, a echar él mismo las paletadas de tierra que cubran su agujero. No conviene animarse demasiado, pero es evidente que en estos tiempos viene actuando como un suicida.
eliaspinoitu@hotmail.com
viernes, junio 13, 2008
Historiador venezolano (Luis Ugalde, s.j.) opina sobre el olvido de Andrés Bello en el nuevo currículo escolar
Les dejo acá el artículo quincenal del historiador Luis Ugalde, s.j. que publica los jueves en El Nacional.
NUESTRO FAMOSO BELLO
Una de las necias exclusiones de la reforma curricular que se quiere imponer es la de don Andrés, a quien Bolívar calificó como “nuestro famoso Bello”. Por lo visto este caraqueño universal, convertido en lumbrera educativa en Chile, para ciertos bolivarianos ni es nuestro, ni famoso, ni bello. ¿Cuándo tendremos un clima de sensatez civilizada, de apertura sin fanatismos, que nos permita valorar en el currículo educativo diversas corrientes y sobresalientes figuras venezolanas y universales? ¿Por qué no hay más amplitud mental y sindéresis a estas alturas de la historia, para enfrentar con éxito la formidable tarea de educar a más de 10 millones de venezolanos? Es lamentable que Zamora, Simón Rodríguez y Bolívar, convertidos en mitos educativos, sean usados sin justa valoración y para excluir a otros. En Chile no se había visto un funeral tan multitudinario ni una despedida tan sentida como la que le hicieron a Andrés Bello cuando murió en 1865. La prensa lo calificó como“el sabio más universal y más distinguido que haya producido nuestro continente”. Su obra, asombrosa y multifacética en la diplomacia, en estudios lingüísticos y gramaticales, en la creación y rectoría de la Universidad Nacional de Chile, vive hoy en la gratitud de los chilenos por su papel en la fundamentación de la vida civil y del sistema educativo de ese país. Obligado por la insostenible pobreza familiar en Londres, Bello se trasladó a Chile en 1829, considerado en ese momento por Bolívar (no sin razón) como “el país de la anarquía”. Cuando el caraqueño murió en 1865, Chile era uno de los países con mejores bases civiles y republicanas de América, gracias en buena parte a la labor de nuestro ilustre compatriota, autor principal de la recopilación del Código Civil, que fue adoptado por la mayoría de los países americanos ¿Por qué ignorar a este educador nuestro, del que justamente se escribió: “dudaría que en una sola vida, un solo hombre pudiera saber tanto, hacer tanto y amar tanto”(Domeyko)? Los intolerantes que expulsaron al Libertador y lo obligaron a morir en la amargura del exilio, igual que a Páez y a otros presidentes de la República, hoy tienen fervorosos seguidores. Simón Rodríguez tiene mucho que enseñarnos, pero hay que apreciarlo en lo que vale, y no seguir su ejemplo en lo que fue un desastre. Creo que Bolívar lo valoró, no tanto por lo que le enseñó en su infancia, como por el acompañamiento que le dio a él, en su gran transformación espiritual en París y Roma hasta el Juramento del Monte Sacro; este cambio llevó al veinteañero patiquín caraqueño a consagrar su vida a la libertad de la América española, dándole un nuevo sentido y compromiso. Veinte años después, Bolívar lo reconoció en carta al maestro: “Vd. formó mi corazón para la libertad, para la justicia, para lo grande…”. La necesidad de formar hoy a los jóvenes para la libertad, la justicia y la solidaridad grande, justifica la inclusión de Simón Rodríguez en el currículo escolar.Pero no es sensato ni beneficioso ignorar que don Simón Rodríguez en muchos aspectos educativos fue un desastre. Bolívar, con poco sentido y nulo acierto, le impuso al presidente de Bolivia, José Antonio Sucre, el nombramiento de Simón Rodríguez como Director de Educación Pública, pero fue tal el fracaso y el caos administrativo de éste, que pronto se vio obligado a renunciar. Por falta de espacio me limitaré a presentar lo que un historiador tan equilibrado y autorizado como John Lynch dice en su excelente biografía de Bolívar de este “profesor loco y sus proyectos chiflados”: “Pronto empezaría [Sucre] a quejarse de la falta de juicio de don Simón, como le llamaba, que había nombrado hordas de maestros sin contar con medios para pagarles y había creado refugios para indigentes con más funcionarios que internos. Rodríguez se convirtió en un lastre y una fuente de problemas; quería independencia para hacer lo que quisiera, insultaba a los nativos, a quienes consideraba unos salvajes ignorantes, y era provocador. Con cautela y temeroso de ofender a Bolívar, Sucre aceptaría finalmente con alivio la renuncia de este personaje irascible e impredecible”. ¿Por qué absolutizar a Simón Rodríguez y perder el aporte educativo de Andrés Bello?
Publicado en el Diario El Nacional, el jueves 5 de junio de 2008
Anécdotas: la leyenda de Gregoria Rivera por Oscar Yanez
OSCAR YANES
¿Dónde están las llaves?
Los cuatrocientos cincuenta años de la ciudad de Mérida me han hecho recordar la historia (para muchos leyenda) del anima de Gregorio Rivera, quien asesinó por celos a su virtuosa esposa y hoy, según creencia extendida por Venezuela, es invocado por miles de personas cuando la memoria falla y no sabes donde están las llaves o no encuentras una prenda de gran valor.
Gregorio Rivera, es el ánima que ayuda todo lo que se ha perdido. ¿Por qué? Porque él mismo recuperó con el arrepentimiento su alma "que ya estaba perdida".
Gregorio espiaba a su mujer durante las 24 horas del día. Algunas veces decía, que se iba para Mucuchies o Tovar y se presentaba en la casa media hora después de abandonar el hogar. Un día encontró a la esposa, que había salido del baño y estaba arreglándose y montó en cólera.
-¿Para dónde vas? ¿Con quién estás saliendo? ¿Cuénteme lo que hace cuando yo estoy afuera? La mujer cansada y furiosa, le gritó: -¡Basta, Gregorio, basta! ¡ya me tienes cansada con esos malditos celos...!- Fue entonces cuando Gregorio Rivera sacó un puñal y trató de matarla. Ella escapó hacia la puerta de la calle y logró salir gritando:
-¡Auxilio! Auxilio! Me quieren matar-. Corrió entonces hacia el convento de las Clarisas y pidió a las monjas que le abrieran, "porque mi marido me quiere asesinar... "
Estaba prohibido entonces darle asilo en los conventos a mujeres casadas, salvo cuando se encontraran en peligro de muerte.
El capellán autorizó protección para la señora de Gregorio Rivera, pero pasaron unos diez minutos y se presentó el hombre gritando desde la calle que "le devolvieran a su mujer".
La Madre Superiora, fue a abrir la puerta, pero después del suceso contó, que se detuvo, pues tuvo un horrible presentimiento y pensó que "al abrir el portón me asesinarían".
Gregorio Rivera, siguió desde la calle insultando a las monjas y pidiendo que "me devuelvan a mi mujer". A los cinco minutos se cansó de tocar y gritar y se fue para la capilla que estaba cerca pero al entrar vio al capellán que arrodillado estaba rezando, y sin pensarlo dos veces le disparó por la espalda y lo mató.
Gregorio dejó el templo, tomó el caballo y huyó. Salió de la ciudad de Mérida y toda la noche galopó hacia la Sierra pero se dio cuenta que lo perseguía una bestia horrible, que según sus propias palabras, "lanzaba fuego por la boca".
Corrió toda la noche y de pronto perdió el sentido; cuando despertó se encontró en la puerta de la iglesia, a pocos metros de donde había asesinado al sacerdote. Lo apresaron y lo condenaron a muerte. Nunca supo como regresó, pero dijo a los jueces: "mi alma se perdió, pero quiero recuperar lo perdido". Gregorio Rivera fue ajusticiado y a los pocos días apareció una perla que se había desaparecido en un río. El propietario contó que invocó su ánima. Después se siguieron acumulando historias de cosas perdidas que aparecían cuando se rezaba por el ánima de Gregorio. En Mérida hay una capilla con un vitral en donde aparece Rivera y si se te perdió algo, recuerda esta historia.
Así son las cosas.
jueves, junio 12, 2008
El “puntofijismo” (Pacto de Punto Fijo, 31 de octubre de 1958) como proyecto de país (y III)
La primera parte de este ensayo puede ser leída acá. y la segunda aquí.
El Pacto como programa de políticas redistribuidoras
En el segundo punto del texto del pacto se lee la siguiente frase: “Las minuciosas y largas conversaciones han servido para comprometer a las organizaciones unitarias en una política nacional de largo alcance (…)”; y subrayamos estas palabras porque aunque luego establece que dicha política se refiere al tema ya bastante citado de la unidad ante la estabilidad democrática, consideramos que se propuso un gran programa de políticas que se mostrará en el llamado “programa mínimo común” (tercera parte punto “c”). De dicho programa se dice: “cuya ejecución sea el punto de partida de una administración nacional patriótica y del afianzamiento de la democracia como sistema”; es decir, planteaba una serie de elementos rectores de las políticas públicas, políticas centradas en la idea de que la democracia no perdura sólo por el respeto de las normas legales o el consenso, sino también y especialmente: por el mejoramiento del nivel de vida. Democracia y redistribución de la riqueza para lograr el bienestar debían ir de la mano, a la larga se lograría la legitimación del sistema por el beneficio que este traería a las mayorías. Estas políticas fueron aceptadas por las cinco organizaciones incluso el Partido Comunista.
El llamado “programa mínimo común” a nuestro entender es la “política nacional de largo alcance” propiamente dicha, y que tiene dos pilares normativos: la redacción de la Constitución Nacional de 1961, la cual fue aceptada por todos los partidos del Congreso involucrados en su elaboración (incluyendo el Partido Comunista de Venezuela); y el Pacto de Punto Fijo. La Constitución permite el desarrollo de un Estado paternalista planteando un conjunto de derechos sociales y teniendo como instituciones intermediadoras entre la sociedad y dicho Estado, a los partidos políticos.
Las políticas públicas redistribuidoras de “lago alcance” fueron las siguientes:
a) La tesis petrolera de Acción Democrática (o mejor decir de Juan Pablo Pérez Alfonzo y que algunos señalan a Rómulo Betancourt como su autor) que tenía como objetivo: el incremento de los ingresos petroleros del Estado por medio de un creciente control estatal de la industria, que no es otro que el llamado “Pentágono Petrolero” formado por: 1. no más concesiones, 2. creación de la Corporación Venezolana del Petróleo (CVP), 3. aumento del control del Estado sobre la industria a través de una mayor fiscalización sobre precios y volúmenes de producción, 4. la participación de las compañías petroleras en los beneficios del negocio no debe exceder de “límites razonables” y por tanto el Estado debe incrementar su participación para poder cumplir con el principio del “petróleo como servicio público”, y 5. la política internacional de defensa de los precios del petróleo por medio de la creación de la OPEP[1]; el objetivo final era la nacionalización;
b) Masificación de la educación con la participación de la Iglesia[2], se propuso el abandono de la tesis educativa de Acción Democrática que planteaba el “Estado docente”; ahora se aceptaría una gran inversión para lograr la matriculación de por lo menos de todos los niños en la educación básica, y gradualmente de los otros niveles del sistema educativo. En esta inversión y esfuerzo participaría la Iglesia;
c) Política económica de “sustitución de importaciones” (o CEPALISTA), con la que se lograría la industrialización del país, mayores empleos y atender las exigencias y demandas del empresariado[3] por medio de una política crediticia;
d) Política de obras públicas[4], con especial énfasis en lo social: escuelas, hospitales y viviendas;
e) Política de pleno empleo sustentada en las anteriores políticas citadas (industrialización y obras públicas) y muy especialmente el burocratismo;
f) Política de reforma agraria[5], siguiendo la tesis agraria de Acción Democrática y las propuestas de dicha política en el gobierno de Medina Angarita (1941-1945); de modo que no generó conflicto con terratenientes o la burguesía del campo.
Conclusiones
La idea de principios, mecanismo de conciliación, y de programa mínimo de políticas públicas redistribuidora de la riqueza permitieron la mayor estabilidad de régimen alguno en la era republicana de Venezuela. Más aún, facilitaron algo extraño en nuestro país: la convivencia de gobierno y oposición con la posibilidad de alternancia en el poder, y la obediencia de los militares a los civiles; y eso sin hablar de la masificación de la educación y el mejoramiento del nivel de vida de grandes sectores hasta principios de los ochenta. A pesar de ello, el fracaso del sistema llegó en la década de los noventa y todavía la sociedad venezolana busca la forma de lograr un mejor acuerdo, que permita armonizar democracia y bienestar.
Bibliografía
BETANCOURT, Rómulo (1958), Discurso a su regreso del exilio, en la Plaza Diego Ibarra, El Silencio. Recuperado en mayo, 25, 2008, http://www.analitica.com/bitblio/rbetancourt/1958_02_09.asp
CABALLERO, Manuel (1998), La crisis de la Venezuela contemporánea (1903-1992), Caracas: Monteávila.
CABALLERO, Manuel (2004), Rómulo Betancourt, político de nación, Caracas: Alfadil
(1958). Pacto de Punto Fijo.
URBANEJA, Diego Bautista, (1985), ”Capítulo 10. El sistema político o cómo funciona la máquina de procesar decisiones”, en: Moisés Naim y Ramón Piñango, El caso Venezuela una ilusión de armonía. Caracas: IESA.
URBANEJA, Diego Bautista, (1992), Pueblo y petróleo en la política venezolana del siglo XX, Caracas: CEPET.
MALDONADO PARILLI, Jorge, (1984), Génesis y consecuencias del 23 de enero de 1958, Caracas: Miguel Ángel García e hijo.
STAMBOULI, Andrés, (2002), La política extraviada. Una historia de Medina a Chávez, Caracas: Fundación de la Cultura Urbana.
Citas:
[1] Diego Bautista Urbaneja, 1992, Pueblo y petróleo en la política venezolana del siglo XX, pp. 389-390.
[2] Andrés Stambouli, Ob.cit., p. 135.
[3] Ibid.
[4] Ibid.
[5] Diego Bautista Urbaneja, Ob.cit., pp.279-280.
Efemérides: 1917: muere la pianista Teresa Carreño
Efemérides de hoy en la Historia de Venezuela e Iberomérica (referencias de En Oriente, Portal de Apure, Diario El Tiempo, Vinicio Romero Qué celebramos hoy, y educar.org):
1813: Al mando del prócer Francisco Esteban Gómez, en San Ana del Norte estalla un importante movimiento armado contra el gobierno español en la isla de Margarita. Dicha revolución logro reactivar la guerra de la independencia en la isla en donde estaban suspendida las acciones militares desde la caída de la primera república con la capitulación de Miranda en 1812, y a los pocos días, se liberó a general patriota Juan Bautista Arismendi y finalmente se destituyo al gobernador realista Don Pascual Martínez.
1819: El general patriota margariteño Santiago Mariño derrota en la batalla de La Cantaura al coronel realista Eugenio de Arana. Esta acción marco el reinicio de la guerra de la independencia en la provincia de Barcelona la cual estaba bajo el dominio realista desde la toma de la Casa Fuerte de Barcelona en 1817; y fue la inspiración que motivo a que el pueblo de Chamariapa cambiara su nombre en 1855 por el de Cantaura.
miércoles, junio 11, 2008
El “puntofijismo” (Pacto de Punto Fijo, 31 de octubre de 1958) como proyecto de país (II)
El pacto fue ciertamente un acuerdo entre los principales partidos de la época para lograr la unidad en torno a la meta de no caer en los errores del pasado (el llamado “sectarismo adeco” o del partido en el gobierno) que llevaron a la caída de la democracia. Es por ello que los firmantes (y en general las fuerzas que habían derrocado a la dictadura y representaban a los sectores más importantes del país) aceptaron un conjunto de principios que regularan su conducta pública para que:
(…) las naturales divergencias entre los partidos, tan distintas de unanimismo impuesto por el despotismo, se han canalizado dentro de pautas de convivencia que hoy más que nunca es menester ampliar y garantizar. (“Pacto de Punto Fijo”, 1958).
Estos principios o “pautas de convivencia” en democracia fueron (siguiendo el texto del Pacto) los siguientes:
- mantenimiento de la unidad en la divergencia,
- tolerancia y mutuo respeto,
- “libertad efectiva del sufragio”,
- “despersonalización del debate”,
- “erradicación de la violencia interpartidista”,
- defensa de la constitucionalidad y del derecho a gobernar conforme al resultado electoral,
- defensa de las autoridades constitucionales en caso de intentarse o producirse un golpe de Estado,
- gobierno de “unidad nacional” (repartición del gabinete entre los firmantes mientras la democracia esté en peligro, y en caso de no desear formar parte del gabinete evitar la “oposición sistemática que debilitaría el movimiento democrático”),
- “programa mínimo común” (“ningún partido unitario incluirá en su programa particular puntos contrarios a los comunes del programa mínimo”)
- “frente unitario” de candidatos, planchas y programa; en caso de amenaza real de reagrupamiento de los grupos antidemocráticos.
- “constitucionalidad estable que tenga en sus bases la sinceridad política, el equilibrio democrático, la honestidad administrativa y la norma institucional”.
El pacto consideró necesario, además, el crear un mecanismo para tomar decisiones cuando la lógica electoral y de acción gubernamental y partidista pudieran generar fricciones o conflictos capaces de poner en peligro la estabilidad de la democracia y el cumplimiento de dichos principios. El consenso inicial en torno a la meta superior de la supervivencia de la democracia llevó a la valoración de este mismo consenso como medio para ciertas decisiones. Los principios que enumeramos son fin y medio de dicho pacto, porque establecen unas metas para ser logradas y a la vez son normas de conducta en el momento de negociar y decidir.
Este mecanismo de toma de decisiones es señalado en dos partes del pacto, la primera cuando en el segundo punto apartado “b” dice (el subrayado es nuestro):
(…) la definición de normas que faciliten la formación del Gobierno y de los cuerpos deliberantes de modo que ambos agrupen equitativamente a todos los sectores de la sociedad venezolana interesados en la estabilidad de la República como sistema popular de Gobierno (“Pacto de Punto Fijo”, 1958).
La segunda cuando señala en cuarto punto apartado “3” dice (el subrayado es nuestro):
Para garantizar la tregua política y la convivencia unitaria de las organizaciones democráticas, se crea una Comisión Interpartidista de Unidad encargada de vigilar el cumplimiento de este acuerdo. Dicha Comisión estará encargada de orientar la convivencia interpartidista, de conocer las quejas que se produzcan contra las desviaciones personalistas o sectarias en la campana electoral y de diligenciar ante cualquiera de los signatarios, y a nombre de todos, la morigeración y control en lo que pudiera comprometer la convivencia democrática (“Pacto de Punto Fijo”, 1958).
En el primer caso se señala la creación de normas para decidir y en el segundo se establece una comisión interpartidista, que pasará a ser realmente interorganizacional cuando se le sumen a los partidos los grupos (“fuerzas ciudadanas”) que se “enumeran” en el primer punto del pacto con el siguiente texto (el subrayado es nuestro):
(…) el reconocimiento de la existencia de amplios sectores independientes que constituyen factor importante de la vida nacional; el respaldo de las Fuerzas Armadas al proceso de afirmación de la República como elemento institucional del Estado sometido al control de las autoridades constitucionales, y el firme propósito de auspiciar la unión de todas las fuerzas ciudadanas en el esfuerzo de lograr la organización de la Nación venezolana (“Pacto de Punto Fijo”, 1958).
“Fuerzas ciudadanas” que están apoyando el proceso de establecimiento de la democracia, al conformar el amplio frente que derrocó a la dictadura y que sostuvo el régimen naciente durante el año 58 ante los intentos de golpe de Estado. Nos referimos a la Fuerza Armada pro democrática e institucional, la Iglesia, la Central de Trabajadores de Venezuela (y los sindicatos en general), y FEDECAMARAS (empresarios). La “comisión interpartidista” (interorganizacional)[1] será el espacio de negociación bajo los principios establecidos, que son principios de conciliación fundamentalmente entre fuerzas sociales heterogéneas[2]; donde todos estos grupos tomarán las decisiones (tomando en cuenta a su vez las demandas de sus respectivas clientelas o representados[3]) que no se pueden dejar al sufragio universal porque afectan a todos por igual y no sólo a las mayorías, y también cuando las normas constitucionales no sean capaces de conservar la estabilidad democrática. Se puede decir que estos principios junto a los espacios y formas de tomar decisiones corresponden al ámbito de las reglas informales que necesita todo sistema político democrático[4].
[1] Andrés Stambouli, 2002, La política extraviada. Una historia de Medina a Chávez, p. 136.
[2] Ob.cit., p. 132.
[3] Diego Bautista Urbaneja, 1985,”Capítulo 10. El sistema político o cómo funciona la máquina de procesa decisiones”, en: Moisés Naim y Ramón Piñango, El caso Venezuela una ilusión de armonía, p. 234.
[4] Ob.cit., p. 229
Efemérides: 1953: es asesinado por la Seguridad Nacional el dirigente adeco Pinto Salinas
1641 Un violento terremoto. Llamado San Bernabé, destruye numerosos edificios e iglesias de Caracas. Es el primer movimiento sísmico que registra la capital.
1816 Piar toma Güiria durante la Campaña de Oriente.
1905 Cipriano Castro inaugura en Caracas el Teatro Nacional, obra del arquitecto venezolano Alejandro Chataing.
1928 Nace en Barquisimeto el escritor Salvador Garmendia.
1953 Ajusticiado por la S. N. el dirigente adeco Antonio Pinto Salinas. En 1951, como dirigente de AD, cumple misiones en Valencia, Coro, Maracay y finalmente en Caracas, donde pasa a formar parte de la Dirección Nacional. Conocida la intención del gobierno perezjimenista de darle muerte, su partido le ordena abandonar el país. Contra su voluntad, acata la orden dirigiéndose al oriente para buscar salida hacia Trinidad. Delatado ante la policía política, es apresado en Pariaguán. Cuando supuestamente era conducido a Caracas, en el lugar denominado Cueva del Tigre, cerca de San Juan de los Morros, fue ultimado por agentes de la Seguridad Nacional. (Imagen: el de la derecha es Pinto Salinas)
1969 Por resolución del Congreso Nacional se crea la Región Guayana integrada por los estados Bolívar (sin el distrito Cedeño) y Delta Amacuro. El 8 de enero de 1980 se le anexaron el Distrito Cedeño y el estado Amazonas.
martes, junio 10, 2008
El “puntofijismo” (Pacto de Punto Fijo, 31 de octubre de 1958) como proyecto de país
Autor: Carlos Balladares Castillo (mayo, 2008)
Introducción
Al leer el “Pacto de Punto Fijo” (cuatro páginas escritas) se puede cometer el error de reducirlo exclusivamente a un acuerdo - entre los principales partidos políticos del momento - que tuvo como finalidad el mantener una “tregua política” que permitiera la celebración pacífica de elecciones y la estabilidad de los gobiernos que surgieran del sufragio. El texto pareciera centrarse en los mínimos necesarios tanto en fines como en medios para lograr esta meta; es como una especie de “cartilla” que expresa lo que aprendieron los demócratas desde que llegaron al poder (trienio adeco: 1945-1948), lo perdieron (golpe militar contra dicho trienio el 24 de noviembre de 1948), y lo mucho que les costó recuperarlo (resistencia y dictadura militar: 1948-1958). La realidad es que el Pacto diseña un modelo, un sistema político; pero también es el fundamento que permitió construir un proyecto de país (bases ideológicas para llevar a cabo un cuerpo integral de política públicas), por lo que podemos hablar perfectamente de “puntofijismo”, de “ideal puntofijista”. Este es el objetivo de este ensayo: mostrar las dos caras del “pacto”: la del mecanismo de toma de decisiones entre actores sociales, y la de ser un proyecto de políticas nacionales que redistribuiyan la renta petrolera.
Origen: el Pacto como aprendizaje político
La primera experiencia de un régimen democrático moderno en Venezuela; y por moderno entendemos sufragio universal (hombres y mujeres alfabetos o no, mayores de 18 años), limpio y justo con actividad competitiva libre de partidos y organizaciones de masas; se da a partir del 18 de octubre de 1945 con la llegada al poder de buena parte de la Generación del 28. Es la democracia de los partidos nacidos del crecimiento intelectual y político de dicha generación, en especial de Acción Democrática que es la que asume el poder tras el golpe y lleva a cabo cambios revolucionarios para la época; logrando obtener un apoyo mayoritario de la población (más del 70% del electorado). Esta experiencia fracasa a los tres años de ponerse en práctica, fracaso que llevará a diez largos y dolorosos años de dictadura militar; tiempo en que los demócratas de esta generación y de las nuevas que asumirán los mismos ideales podrán meditar sobre las razones del fracaso. Son diez años de pedagogía política centrados en la redefinición de la concepción de lo que debe ser una democracia.
Los protagonistas, en especial los líderes y militantes de Acción Democrática (los “adecos”), aprendieron que la democracia no se reduce a una forma de tomar decisiones centrada en el voto mayoritario, y que mucho menos el partido que obtiene el apoyo popular (por más grande que sean los resultados electorales que lo favorezcan) es el único capaz de representar al pueblo en su totalidad. Las mayorías son variables con el tiempo; y además, las minorías no pueden dejarse de lado en las decisiones más importantes. Al entender la democracia de esta forma, la idea que se tiene de lucha política cambia radicalmente; el partido de gobierno no debe ver a la oposición como un “enemigo” y viceversa. La lucha, más que lucha era competencia, negociación y discusión; y no una guerra que busca la destrucción del otro, y que tendería a la inestabilidad de cada gobierno al recurrir a la intervención de la Fuerza Armada por medio de los golpes de Estado[1]. El peligro de que la situación de conflictividad de la sociedad llevara a un nuevo golpe, fue una realidad durante todo el año 1958, lo cual se pudo vivir con dos intentonas golpistas; y que hizo ver la necesidad de un pacto entre los partidos políticos para contrarrestar este peligro. Al final se logra una nueva definición de democracia: el gobierno de las mayorías en consenso con las minorías, consenso que se ampliaría a un “programa mínimo”.
El otro factor de origen del pacto podría describirse como un aprendizaje menos racional que el anteriormente descrito; debido a que se centró en una emoción, en un sentimiento colectivo nacido del proceso de lucha contra la dictadura: era el llamado “espíritu del 23 de enero”. Dicho “espíritu” se puede definir como el hecho de que el país entero (el pueblo y sus organizaciones) estaba unido en el deseo de libertad y democracia. Las divisiones del pasado (trienio adeco e incluso durante la dictadura) habían desaparecido por el logro del derrocamiento de la dictadura, y por la alegría de iniciar la reconstrucción real (ahora si) de la democracia. Este sentimiento se expresa en todas las declaraciones que daban los líderes políticos al volver al país, e incluso ante las situaciones problemáticas del 58 (como las intentonas que hemos señalamos) tal como las reúne Jorge Maldonado Parilli[2] y que acá transcribimos algunos ejemplos de los discursos a pocos días del 23 de enero (el subrayado es nuestro):
Las perspectivas de un desarrollo progresista de nuestro país son hoy más luminosas que nunca. La historia ha demostrado que son inmensas las fuerzas e inagotables los recursos en la lucha por la libertad y la democracia. Las potentes fuerzas tendrán un papel más activo en la medida en que consolidemos la unidad fraternal y militante, sin ninguna exclusión (Gustavo Machado, 1958).
Hay que reencarnar en esta tierra y sus hombres y sus mujeres el espíritu de Simón Bolívar. Y todos hemos concluido en qué sólo a través de una fórmula podemos lograrlo: la unidad, la unidad, la unidad (Jóvito Villalba, 1958).
Unidos todos (…) encontrando que por encima de las propias ideas hay ideas superiores, que por encima de las propias aspiraciones comunes y esas aspiraciones comunes se representan en la grandeza verdadera, digna y libre de esta Patria amada de Venezuela (Rafael Caldera, 01 de febrero de 1958).
Hombres de todos los partidos políticos y sin militancia en ellos, demostraron en las cárceles, en los campos de concentración de Guasina y Sacupana y en el exilio, que en este país vive la pasión por la libertad, y que llegando el momento el pueblo venezolano se uniría, como se unió para realizar esa gloriosa epopeya de la reconquista de la libertad (Rómulo Betancourt, 09 de febrero de 1958)[3].
Ambos aprendizajes: el racional y el emotivo, facilitaron la elaboración y realización del pacto; e incluso el comprometerse en un programa de mayores intenciones.
Citas:
[1] Manuel Caballero, 2004, Rómulo Betancourt, político de nación, pp. 297-299.
[2] Jorge Maldonado Parilli, 1984, Génesis y consecuencias del 23 de enero de 1958, pp. 80-83.
[3] Rómulo Betancourt, 1958, Discurso a su regreso del exilio, en la Plaza Diego Ibarra, El Silencio.
Efemérides: 1828: y se murió la Gran Colombia en la Convención de Ocaña
1521 Los indios destruyen la misión de Cumaná construida por Las Casas.
1786 Nace en Villa de Leiva, en la antigua Nueva Granada, hoy República de Colombia, el Capitán Antonio Ricaurte, quien se sacrificó en el parque de San Mateo para que no cayera en manos de los realistas.
1799 Bolívar llega a Madrid. Se residencia en la casa de Manuel Mallo, donde vive su tío Esteban.
1806 El diario francés Ambigú opina de Miranda: “este hombre emprendedor sueña desde hace 30 años en fundar un imperio en el continente americano”.
1814 Bolívar envía desde Caracas una nota de protesta a Gran Bretaña, por la ofensa infligida en Saint Thomas a los Comisionados del Gobierno Venezolano ante el Gabinete británico.
1815: El máximo jefe militar realista en Venezuela Pablo Morillo sale desde Cumaná rumbo a La Guaira. De esa manera Morillo culminó exitosamente su campaña de dominación sobre las tropas patriotas de las provincias de Margarita y Cumaná las cuales quedaron sometidas en dos meses.
1828: En La Cruz (Colombia) cesan abruptamente las cesiones de la histórica Convención de Ocaña. Esta reunión que intento reformar la constitución grancolombina de 1821, fracaso por el retiro en esta fecha de el diputado del Departamento de Maturín (actuales estados orientales) Pedro Vicente Grimón y 19 de sus compañeros bolivarianos por fricciones políticas con el bando de los santanderista, todo lo cual ocasionó la instauración de la dictadura de Simón Bolívar quien renunció a la presidencia de la Gran Colombia en 1830 (Imagen: Plaza y Templo de San Francisco en Ocaña, Colombia).
1933 Como resultado de la mediación amistosa de Brasil, México y Venezuela reanudan sus relaciones diplomáticas.
1951 El venezolano Alfonso Carrasquel se convierte en el primer beisbolista latinoamericano en participar en un Juego de Estrellas de Grandes Ligas.
1954 Asesinado en Barranquillas, Colombia, el teniente León Droz Blanco, opositor a Pérez Jiménez.
2001 Chávez anuncia la creación de los Círculos Bolivarianos (grupos màs cercanos a su persona que su partido el Movimiento Quinta Repùblica y con ciertas caracterìsiticas paramilitares, en los años siguientes seràn conocidos por su violencia contra los grupos opositores).
lunes, junio 09, 2008
Efemérides: 1890: Nace en Cumanà el gran poeta José Antonio Ramos Sucre
1654: Por real cédula los territorios de la gobernación de la Nueva Cataluña o Cumanagotos son oficialmente anexados a la Provincia de la Nueva Andalucía (Cumaná). De esta manera desapareció la jurisdicción político territorial que gobernó los territorios del actual estado Anzoátegui desde 1631 hasta la presente fecha.
1814 La Gazeta de Caracas publica un artículo de Bolívar, sin firma, en el cual expresa que los intereses de Inglaterra la inducirán a proteger la independencia de Hispanoamérica contra España y eventualmente, contra otras naciones del Continente europeo.
1828 Bolívar le confiesa a Perú de Lacroix, en Bucaramanga: “...En el año 17, después de mi segunda expedición sobre Venezuela, y antes de emprender la de Guayana, los españoles me derrotaron en Clarines dos o trescientos reclutas, a cuya cabeza me hallaba, y corrió la voz de que yo era desgraciado y que todo me salía mal.
1890: En Cumaná (Edo Sucre) nace el abogado, diplomático y poeta José Antonio Ramos Sucre. Fue docente en el Liceo Andrés Bello de Caracas, interprete de la cancillería entre 1915 y 1929, Cónsul General de Venezuela en Ginebra (Suiza) y autor de los afamados poemarios Trizas de Papel, Las Formas del Fuego y La Torre de Timón entre otros. Acà y aquì algunas cosas sobre el poeta, y su poesìa acà.
domingo, junio 08, 2008
Historiador venezolano (Luis Britto García) opina sobre las FARC y Colombia
Artículos de opinión de los historiadores venezolanos
Les dejo acá el artículo semanal del historiador Luis Britto García que publica todos los domingo en El Últimas Noticias.
Historiador venezolano (Simón Alberto Consalvi) opina sobre el decreto-ley chavista sobre Inteligencia y contrainteligencia
Les dejo acá el artículo semanal del historiador Simón Alberto Consalvi que publica todos los domingo en El Nacional.
Historiador venezolano (Manuel Caballero) opina sobre el candidato demócrata Obama.
Artículos de opinión de los historiadores venezolanos
Les dejo acá el artículo semanal del historiador Manuel Caballero que publica todos los domingos en El Universal.
¡Obama presidente!
La elección de Obama sería la primera revolución social del siglo XXI
En el momento de escribir estas cuartillas, el senador Barack Obama acaba de superar el número de delegados a la convención que lanzará la candidatura presidencial demócrata. El título de esta columna no refleja entonces una realidad, o no la refleja todavía, pero de seguro será el slogan que brotará de millones de gargantas estadounidenses de aquí hasta noviembre; y si Obama logra superar el escollo de su elección, será un hecho real durante los próximos cuatro años, y quizás ocho.
Pero aun si no lograse llegar por votos al Salón Oval, a Barack Obama "nadie le quita lo bailao", como dirían nuestros antepasados andaluces. Lo cual se resume en una simple frase: su nominación es la primera revolución social del siglo XXI. Para compararla con la rusa de 1917, la nominación es su Febrero, su elección sería su Octubre. Y eso tiene y tendrá lugar sin guerras ni hambrunas, sin disparar un solo tiro, por el impulso revolucionario del voto popular.No es un gazapo
No es un desliz de pluma: hemos escrito, y aquí subrayaremos, revolución social. Porque esta vez no se trata de un simple cambio político, como podría serlo el de una administración republicana por otra demócrata; y ni siquiera una simple lucha por el poder como al final se reveló la dominación bolchevique en Rusia, sino de un cambio muy profundo en la entraña misma de la sociedad, que en cuarenta años pasó del impune asesinato del adolescente negro Emmet Till en Little Rock, Arkansas, a que hoy un negro pueda pelear por la presidencia con la mayor expectativa de triunfo.
Cierto, Barack Obama no es negro, sino mulato: su madre era blanca. Pero, uno, ese es un matiz que nada significa para los racistas de todo el mundo; dos, que su condición de mulato agrava su caso a los ojos de esos mismos racistas por ser el producto de lo que éstos más temen y odian: la mezcla de colores, el mestizaje, y peor aún, no fruto de la violación de una negra por un blanco, sino de la cópula consentida (y santificada por la iglesia) de un negro y una blanca. Contar los pollos
Cierto también, no se puede decir todavía, como suelen sentenciar los franceses, que les jeux sont faits o, más a la criolla, que no se deben contar los pollos antes de nacer: falta ver si la "mayoría [nada] silenciosa" a la que apelaba Nixon saca fuerzas del fondo de varios siglos de esclavitud impuesta a los negros y derrota a Obama en las elecciones; así sea para darle la presidencia al alter ego de George W. Bush, acaso el peor gobernante de la historia de EEUU.
Pero aun en esa eventualidad, digámoslo de nuevo, Obama ya ganó. Pero mucho más que él, ganó su país, el cual otra vez (después de Lincoln), protagoniza una revolución que cambia la faz de EEUU y de la percepción de ellos en el mundo. Una idea de lo que eso significa, aunque pueda parecer epidérmica y sólo personal es lo que me ha sucedido escribiendo este artículo. Cuando escribí la palabra racistas, al principio había puesto "la sociedad WASP", pero de inmediato me di cuenta de mi error, producto de un tenaz estereotipo: una gran mayoría de los apoyos de Obama proviene de jóvenes white anglo saxon protestants (WASP).Y a mí ¿que me importa?
¿Tiene todo eso algún valor viéndolo desde la perspectiva de nuestro país? ¿Qué puede interesarnos, salvo a los estudiantes de diplomacia, lo que suceda allá en el Norte? La pregunta es tonta, pues, como sucede siempre con un gran imperio (Roma, España, Inglaterra), ellos están presentes en nuestro pan y nuestras lágrimas cotidianos. Pero también si salimos de las generalidades y entramos en lo concreto, en lo más específico.
En primer lugar, la nominación y sobre todo la posible elección de Obama deja al teniente-coronel colgado de la brocha propagandística. Nada de lo que dijese contra los gobiernos de Estados Unidos tenía un impacto tan eficaz como mostrar la vera efigie de un gringo rubio, coloradote y ojiazul, un John Wayne al que no le hacían falta las cuarenta y cinco (y más si las mostraba al cinto) para odiarlo no por lo que hacía sino por lo que era: blanco, anglosajón y protestante. Lo que permitía dirigir los odios de mestizos hispanoparlantes y católicos.
Nada vale ahora dragonear de "zambo", porque quien gobierna en el Norte odiado es mulato y hasta sospechoso de ser medio musulmán.
Ser o no ser
The time is out of joint ("El mundo está puesto al revés") dice Hamlet al comienzo de su queja cuyo verso más conocido es aquel que reza to be or not to be. Nunca como en los tiempos que vivimos, las tornas se han vuelto tales a pareja velocidad.
Mientras que en Estados Unidos racistas, se candidatea y casi seguro se elige a un negro, en Suráfrica, en el país de ese inmenso negro antirracista que se llama Nelson Mandela, los pobres de esa nación persiguen y tratan de linchar a los africanos de otros países que se han refugiado huyendo de la hambruna, la discriminación y la violencia. El racismo, valga la paradoja, no tiene raza.
Y sin ir tan lejos, en un pobre país situado al norte de la América del Sur, una izquierda a la cual una doctrina insistente había logrado hacer de su antimilitarismo y su antiautoritarismo casi una segunda naturaleza muy seria y muy formal, hoy se pliega sumisa a los caprichos de un bufonesco mandón, militarista y autoritario, y tiene el cinismo de proponer semejante excreta de nuestro peor siglo XIX, nada menos que como "socialismo del siglo XXI".
hemeze@cantv.net