En
torno a los debates historiográficos y/o históricos: ¿Cuáles han atrapado su
atención y/o cuáles ha estudiado? ?¿Cuál es su posición ante ellos?
Un tema interminable y que cada año genera
el mismo debate: La conquista del Nuevo Mundo y el tema indígena. Aquí tenemos
presente un inmenso campo de estudio, donde se ha hablado y escrito mucho, pero
se ha analizado muy poco; de hecho en mis clases de Historia colonial (tanto en
la mención Venezuela como América) abordo el tema a partir de los aportes de
Francisco de Vitoria y como los mismos repercutieron en el debate de la Junta
de Valladolid entre Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda, tema que
ha sido descuidado por los defensores de la tesis de “invasión”. En cuanto a mi
posición sobre este tema de estudio sólo me voy a limitar lo que siempre digo a
mis estudiantes cuando inicio la clase sobre ese tema: “El 12 de octubre de
1492, cuando Cristóbal Colón puso su primer pie en la isla San Salvador (Guanahani),
generó inmediatamente un terremoto filosófico, jurídico y teológico en Europa,
generando transformaciones importantes en el estudio del Derecho hasta ese
momento” Esa es mi posición.
¿Cuál
fue su primer escrito como historiador o cuál fue el que más le gustó?
Como historiador he escrito varios
trabajos, sin embargo hay uno que me ha gustado mucho pero que no ha sido
publicado: es un análisis sobre el gobierno de Hugo Chávez a partir del
concepto “Proyecto Nacional”, donde hago un estudio sobre el concepto, sus características
y trascendencia para la historia política de una nación, a eso le agregué un
análisis sobre populismo y psicología de las masas. La razón por la cual no fue
publicado es porque ese trabajo fue solicitado para ser presentado como estudio
introductorio de una serie de libros sobre los discursos de Hugo Chávez ante la
Asamblea Nacional, trabajo que fue publicado entre los años 2013 y 2014, pero
sin mi estudio introductorio ya que a las autoridades de la Asamblea Nacional
(dominada por el chavismo) rechazaron mi estudio por considerarlo una “afrenta
a la memoria del Comandante Eterno”. Sin embargo, aunque el trabajo fue
rechazado, aún lo conservo y lo tengo para una publicación futura.
¿Cuáles
son sus ritos cuando se dedica a escribir sobre historia?
Mis ritos van desde lo sagrado hasta lo
mundano:
1.
Antes de escribir sobre
cualquier tema hago lo que realizan todos los historiadores, el tradicional
arqueo de fuentes, ver cuál es el estado del arte y analizar las conclusiones
que se han presentado sobre el tema.
2.
Al momento de escribir, en mi
computadora comienzo a generar una tormenta de ideas, empiezo a desahogarme
sobre el tema, lo que conozco y vaciarlo en una o varias páginas de Word.
Aunque no lo crean, este ejercicio ayuda porque cuando se llegan a los
tradicionales “estancamientos creativos”, el pasear por esas ideas desordenadas
te reubica en el tema y lo que trabajas.
3.
Al momento de escribir me gusta
estar lo más relejado posible (cosa que es difícil en los actuales momentos del
país, pero se intenta), para ello coloco música, específicamente a los Beatles,
eso me relaja y me ayuda a organizar las ideas.
¿Qué
tiempo diario o semanal le dedica a la historia?
Las 24 horas del día, los siete días de la
semana, recuerda que todo lo que hacemos, observamos, leemos o escuchamos (por
más simple que sea) es historia y nos pueden ser de gran utilidad en el futuro.
¿Qué
está leyendo en este momento?
Más bien estoy releyendo, estoy leyendo
“Psicología de las masas y análisis del yo” de Freud.
Además
de la Historia, ¿tiene otros gustos, placeres o vicios?
Escuchar rock y heavy metal (eso ayuda a
relajarme y mucho), además soy frenético jugador de video juegos y juegos de
computadora y por supuesto, leer un buen libro.
¿Cómo
es su relación con las redes sociales e internet en general?
Extremadamente activa, es una ventana
abierta y libre para conocer el mundo.
¿En
qué puede ayudar el internet a la historiografía?
La internet y más en específico las redes
sociales, son el espacio donde los historiadores amamos más nuestro oficio como
científicos sociales. La humanidad ha pasado por distintas etapas que ha
impactado incrementando la participación de las personas en los espacios de
opinión pública (libro, prensa, radio y TV); la internet ha significado un salto
impresionante, haciendo que los espacios de opinión pública sean infinitos y
puedas expresar libremente tus ideas a quien desees y como desees. Las redes
sociales y los archivos históricos guardan algo en común: ambos depositan la
memoria de la humanidad, con la diferencia que la primera es limpia, altamente
activa e infinita, mientras que la segunda es polvorienta, pero ambas son
valiosas para la humanidad.
¿Cómo
sobrevive (en lo económico, en lo profesional y en lo espiritual) siendo
historiador?
En la actual situación país uno debe hacer
malabarismo para poder sobrevivir en Venezuela y más con los bajos salarios,
¿qué hago para sobrevivir? Simple, desarrollar trabajos que me solicitan fuera
del país lo cual me permite obtener un pago extra importante, por supuesto está
mi labor como investigador de la Asamblea Nacional y mis funciones como
profesor de la UCV; a ello se agrega mi trabajo como freelance.
¿Se
puede ser historiador en Venezuela?
Claro que se puede, sin problema alguno.
Sólo que se necesita vocación y sobre todo ser muy autodidacta y desarrollar
buen olfato para estudiar los temas.
¿Para
qué sirve la historia?
Para enseñarle a las personas las causas de
los distintos procesos que condujeron a importantes transformaciones y llamar
la atención sobre los errores cometidos para que o vuelvan a repetirse, aunque
en eso último nadie hace caso.
¿Tiene
futuro el estudio de la historia en general y en Venezuela?
Claro que si, sólo que el historiador debe
salir de esa burbuja denominada “fetiche del documento”, alzar la cabeza y
adentrarse en otras disciplinas para que poder desarrollar nuevos e
interesantes trabajos. Recordemos que ningún tema, por más estudiado que esté,
se agota; siempre, siempre habrá algo que fue descuidado por un investigador y
uno puede llenarlo.
Si
cree que existe la venezolanidad o la identidad venezolana ¿cómo la definiría?
El venezolano es un personaje interesante,
objeto de estudio incluso en medio de la actual situación país. Estudios
generados por la historia construida a partir de la memoria donde se nos
denomina como “sangre Caribe e indómita” cosa que no es así. El venezolano es
una persona que ama la libertad y resolver todo en forma pacífica. Ese
“chévere” con que nos definían y nos siguen definiendo a nivel mundial, simboliza
lo que es la venezolanidad: Una persona solidaria, amante de vivir su vida
tranquilamente, pero que en los actuales momentos atraviesa por una situación
convulsionada.
¿La
historia de Venezuela ha sido un fracaso?
La historia construida a partir de la
memoria ha querido generar esa hipótesis. Si hacemos un balance de nuestra
historia observaremos como este país ha sido siempre el centro de atención (más
allá del petróleo y las mujeres bellas), hemos sido ese centro de observación
porque ofrecimos importantes aportes al proceso de democratización de la
región, por ser un país puertas abiertas al mundo. Venezuela no ha fracasado,
sólo que los políticos y los ciudadanos no prestaron atención a los
historiadores (Germán Carrera Damas, Luis Castro Leiva, Domingo Irwin y otros)
quienes advirtieron hasta el cansancio el desastre que se avecinaba y no
atendieron esas alertas tempranas.
¿Qué
piensa de nuestro presente?
Es una oportunidad más que dorada para
replantear nuestro Proyecto Nacional y ver si terminamos de superar el
irracional culto al héroe, entender que un país se construye desde el respeto a
las leyes e instituciones y no por una renta “infinita”, y sobre todo: que el
ciudadano entienda su rol.
Recomiéndeme
más de 2 historiadores noveles y/o jóvenes que deberíamos entrevistar
Tengo a dos; el primero ya graduado,
profesor universitario y gran amigo, el Prof. Edgar Maldonado,
El segundo aún no se ha graduado (está en
tesis) pero estoy seguro que será un gran historiador: Andrés Goldstein.
Ahora
invente una pregunta, la hace y se responde a sí mismo.
¿Sí nacieras
nuevamente, volverías a estudiar historia?
Sin duda alguna, no me arrepiento. Historia
es la disciplina más completa que existe en las Ciencias Sociales y
Humanidades.