Es lamentable que esta fecha esté pasando desapercibida para las mayorías, y muy especialmente para el Poder Nacional (salvo el de República Dominicana ver aquí) que se dedica a homenajear a Manuela Sáenz (que tiene sus méritos pero...) y no a este prócer civil. Las razones las explicamos acá. Sólo su región natal le celebra. En Caracas su estatua (ver imagen tomada de La maracucha radio) está en una esquina casi oculta que por lo general está llena de basura en la avenida que lleva su nombre. Creo que merece ser cambiada a un lugar más digno y visible en esa misma calle. Les dejo varios artículos, con las modestas celebraciones, que no tiene desperdicio.
El Nacional / ND
Baralt
“No te duela mi suerte.
No maldigas mi nombre, no me olvides”.
Adiós a la patria.
Baralt.
Rafael María Baralt nació en Maracaibo el 3 de julio de 1810, primer año de Venezuela. De niño vivió con sus padres en Santo Domingo, y para 1821 estaba de regreso. Se cuenta que de 1824 a 1828, estudió en Bogotá bajo la protección de su tío Luis Andrés, senador de la Gran Colombia. En el 28 reaparece en Maracaibo, y tiene ocasión de mostrar sus habilidades de escritor político.
En 1830, José Antonio Páez le encomendó a Codazzi realizar el Atlas de Venezuela, y tiempo después, en 1839, el geógrafo consideró que no sería suficiente sin la historia que lo acompañara y diera cuenta de la tierra que describía. Tuvo la fortuna de pensar en Baralt, quien apenas contaba con 29 años de edad.
Fue su prueba de fuego. Como lo refirió, trabajando sin mirar el reloj, antes de los 30 años, en medio de peripecias inimaginables, el joven escritor culminó el Resumen de la Historia de Venezuela desde el año de 1797 hasta el de 1830, con un breve bosquejo histórico que comprende los años de 1831 a 1837, en tres volúmenes.
En 1840, geógrafo e historiador viajaron a París para imprimir sus obras. En la ciudad se encontraba el barón Alejandro de Humboldt, quien revisó los trabajos de Codazzi y se hizo leer capítulos de la historia. A poco de regresar a Caracas, en 1841, Baralt percibió que el ambiente le era más hostil que propicio.
El “bosquejo republicano” que había incorporado le trajo serios contratiempos, comprobó las dificultades de escribir historia mientras los protagonistas aún dominan la escena. Muchos militares pensaron que sus proezas no estaban debidamente exaltadas o eran escasos los inciensos. Episodios como La Cosiata de 1826, la Revolución de las Reformas de 1835, o las hazañas del coronel Carujo y su brutal ultimátum al presidente Vargas se contaban tal como habían ocurrido, y esto era inaceptable.
No importó que aquella obra significara una extraordinaria contribución historiográfica.
Se impuso la política de campanario, y el joven historiador tuvo que irse de Venezuela.
Entonces entendió que la tarea de escribir la historia de un país “recientemente conmovido” era algo muy difícil, pero al propio tiempo necesario, “apartando la vista del laurel, de la toga, del poder y del oro”.
Fue enviado a Europa en una discreta misión, pero al poco tiempo lo dejaron sin sueldo.
Resolvió establecerse en España, y allá fue influyente y famoso hasta el punto de ser el primer “indiano” en ingresar a la Real Academia de la Lengua.
En España dirigió influyentes periódicos, El Tiempo, El Siglo, La Gaceta de Madrid y la Revista Española de Ambos Mundos, entre ellos. Trabajó incesantemente y dejó innumerables obras como poeta, crítico, filólogo y pensador político: El diccionario de galicismos, Obras políticas, económicas y sociales, De la libertad de comercio, Lo pasado y lo presente, Programas políticos, De la democracia en Francia (Refutación a Guizot), La libertad de imprenta. Entre sus papeles consta que escribió un ensayo sobre la Europa de 1848, el año del Manifiesto comunista y uno de los periodos más revueltos del viejo mundo, pero infortunadamente no se ha encontrado.
Baralt fue, quizás, el escritor venezolano de ideas más avanzadas del siglo XIX, y figuró, sin duda, entre los más adelantados de España. Augusto Mijares analizó su pensamiento en Las ideas políticas de Baralt. El ensayista anotó: “Me refiero al hecho desconocido, creo, hasta para los más especializados críticos venezolanos, de que Baralt no sólo fue vehemente defensor del liberalismo político en toda ocasión, sino que se aventuró a seguirlo en sus conexiones con las doctrinas más radicales de la época, y hasta tocar con el marxismo”.
Al tomar notas de la biografía que escribí sobre Mijares, encuentro que valoraba a Baralt por sus ideas y por sus actitudes: el juicio severo sobre los sucesos de La Cosiata, su análisis sobre el pensamiento de su predecesor en la Real Academia, don Juan Donoso Cortés, y su neocatolicismo, de acuerdo con el cual como observa el escritor sostuvo que “el absolutismo y la teocracia ni son españoles ni cristianos”, y, sin duda, por sus tesis políticas.
Al glosar su pensamiento, Mijares observa que escribía en los años turbulentos de Europa. En uno de sus textos, el zuliano expresó: “¿Qué debe hacerse para conservar la propiedad e impedir la injusta repartición de los bienes que ella produce?”. Esta fue su respuesta: “La asociación del capital y del trabajo, del empresario y del obrero”.
Al ubicarlo políticamente, Mijares lo considera “liberal y sólo liberal, pero de amplia receptividad y valerosa fe”. Con la excepción de los revolucionarios y teóricos perseguidos, agrega, “sería difícil encontrar quien se expresara en la Europa continental con más audacia”. Conviene reencontrar, 200 años después, a uno de los más finos escritores de la lengua y uno de nuestros pensadores de mayor visión histórica. Murió en Madrid a los 50 años de edad, sin retornar a la “tierra del sol amada”.
sconsalvi @el-nacional.com
Fiesta y honores para Rafael María Baralt
La Verdad - Aziel Figueroa Betancourt - Maracaibo - 04/07/2010 00:01 04
Julio, 3 de 1810. Maracaibo ve nacer a quien años más tarde se convertiría en la máxima figura civil del Zulia y una de las cumbres literarias de Hispanoamérica. Julio, 3 de 2010. La ciudad entera conmemoró ayer los 200 años de aquel momento que trascendió en la historia. Las más distinguidas personalidades de la vida política, cultural, diplomática y educativa del estado Zulia se reunieron ayer en el casco histórico de la urbe marabina para participar en los actos conmemorativos del bicentenario del natalicio de Rafael María Baralt y rendirle un significativo homenaje a la figura de este gran literato.
La plaza que lleva su nombre y la estatua pedestre que se erige frente a la iglesia San Francisco de Asís, mejor conocida como El Convento, lucieron una cara remozada. El propio Pablo Pérez, gobernador del estado, quien junto a monseñor Ubaldo Santana, arzobispo de Maracaibo, presidió el acto central, inauguró la primera etapa de los trabajos de recuperación y rehabilitación de la zona histórica. Los edificios más cercanos a la iglesia y los pisos de granito que la rodean también fueron remodelados. Justo después del solemne tedeum que monseñor Ubaldo Santana celebró en El Convento, el primer mandatario regional anunció que su gobierno trabajará en un proyecto ambicioso para recuperar el casco central de Maracaibo, que pronto expondrán ante la sociedad civil, instituciones e individualidades del estado, a fin de que "todos colaboren". Daniel Ponne, alcalde, agregó, por su parte, que en los próximos días publicará un decreto que dará un "viraje" importante a la plaza Baralt y su entorno, desde El Malecón y la avenida Libertador hasta el Paseo Ciencias.
Profeta en su tierra
Al pie de la estatua pedestre del "ilustre hijo del Zulia", las personalidades asistentes en representación de los poderes públicos del estado, las universidades públicas y privadas, los familiares de Baralt y los miembros de la Junta pro Bicentenario del Natalicio entregaron ofrendas florales, mientras resonaba en el aire el Himno del estado Zulia. Luego, Pablo Pérez encendió el nuevo sistema de iluminación que de ahora en adelante adornará la estatua y El Convento.
Poco después de las 7.00 de la noche se inició el acto protocolar que tuvo lugar en el Teatro Baralt. Durante el discurso de apertura, el gobernador señaló que decretaba el estudio de la vida y obra de Rafael María Baralt en todas las escuelas dependientes del Ejecutivo regional. "A pesar de no ser profeta en su tierra, Baralt dejó un legado importante al estado, al país y al continente latinoamericano en todas las áreas que desempeñó. Como político dejó frases importantes que siguen vigentes en estos momentos en Venezuela, tales como: &39;La política no es para dividir sino para conciliar&39;. Él consideraba que los gobiernos provinciales y municipales de su época debían tener autonomía".
El Poder Legislativo del estado Zulia confirió, acto seguido, la orden Rafael María Baralt en su primera clase a monseñor Ubaldo Santana. Julio Portillo Fuenmayor, director ejecutivo de la Junta pro Bicentenario y presidente de la Academia de la Historia del estado Zulia, fue el orador de orden de la sesión. Enfatizó que de no ser por el Gobierno del Zulia, los 200 años del natalicio de Baralt hubiesen pasado desapercibidos en Venezuela. "El Gobierno nacional ha ignorado esta celebración, una conducta inaudita, porque si algún hombre le ha dado mayor lustre a Venezuela, ese fue Baralt".
Más homenajes
El 24 de octubre del 2009, el gobernador juramentó la Junta pro Bicentenario. El 19 de abril pasado se realizó en Bogotá un solemne acto, liderado por Jaime Posada, presidente de la Academia Colombiana de la Lengua. Portillo Fuenmayor fue el orador de orden y en representación del Zulia entregó una réplica del cuadro de Baralt existente en la Academia Nacional de la Historia de Venezuela, del pintor Araujo García, que data de 1910.
República Dominicana no se quedó atrás, dado que la madre del literato era de esa nacionalidad. Leonel Fernández, su presidente, decretó la creación de una Comisión Bicentenaria del Natalicio e idearon la puesta en circulación de un sello postal con el rostro de Baralt, y bautizaron con su nombre una calle, una escuela y una biblioteca. Está previsto que el 22 y 23 de julio monseñor Nicolás de Jesús Cardenal López Rodríguez, arzobispo de Santo Domingo, y el arzobispo de Maracaibo celebren una misa solemne conjunta en la Catedral Primada de Santo Domingo, y que las autoridades del país caribeño entreguen una ofrenda floral en la plaza que lleva el nombre de Baralt en la capital dominicana. Se espera la asistencia de las autoridades del Zulia, la Junta del Bicentenario zuliana y algunos familiares del hombre que tuvo la oportunidad de presenciar la Batalla Naval del Lago de Maracaibo.
Elogios al homenajeado
Lía Bermúdez. Escultora y miembro de la Junta pro Bicentenario. "La plaza Baralt estaba abandonada entre la basura. El mejor homenaje que podíamos hacerle a Baralt era remozar y limpiar este lugar".
Óscar Belloso Medina. Rector de la Universidad Rafael Belloso Chacín. "Esto es una reafirmación del gentilicio de la zulianidad. Baralt es un hombre de estirpe muy significativo para los zulianos y de pasos a seguir".
Rosa Nava. Secretaria Regional de Cultura. "Todos los zulianos deberíamos celebrar este bicentenario. Baralt fue un zuliano excepcional que nos debe hacer sentir orgullosos de nuestro gentilicio".
Ubaldo Santana. Arzobispo de Maracaibo. "Baralt es uno de los grandes hombres del Zulia, esos que trascienden los tiempos y tienen un mensaje alentador para las generaciones presentes y futuras".
Daniel Ponne. Alcalde de Maracaibo. "Baralt es un ejemplo que hace falta en estos momentos en Venezuela. Hoy (ayer) se inicia el camino para recuperar la plaza Baralt y su entorno histórico".
Lo de Baralt no creo que sea tan premeditado como se piensa, más bien pienso que es el reflejo condicionado de tantos años: Aquí ha habido una larga tendencia a poner a Baralt en un muy segundo plano. No sé los motivos exactos de éso y más bien sería bueno hacer una investigación histórica al respecto. Por lo tanto, la "Revolución chavista" sólo continúa lo que siempre se había hecho con Baralt.
ResponderBorrarAsí es, por eso decimos "las mayorías" lo tienen olvidado. Merece un mayor reconocimiento. GRacias por comentar.
ResponderBorrarExtraordinario Baralt y le hace honor este nota llena de datos y de detalles significativos.
ResponderBorrarMaría Eugenia Sáez
El postponer a Baralt se ha de deber a que vivió y triunfó en España.
ResponderBorrarMaría Eugenia Sáez