A la joven historiadora Merlen Delgado la conozco desde hace unos cuantos años gracias a su importante tarea en la biblioteca de la Universidad Monteávila. Admiro su pasión por la literatura, su constancia en el trabajo y el que sea una excelente madre.
1. Foto.
2. Resumen de su vida como historiador:
(ciudad de nacimiento, año), ciudad donde vive actualmente, pregrado, postgrado, docencia, investigación, publicaciones (ENVIAR LISTA POR FAVOR).
Nací en Caracas en el año 1980, actualmente
vivo en la misma ciudad. Realicé estudios de pregrado y posgrado en la
Universidad Central de Venezuela, y actualmente estoy en proceso de defensa de
Trabajo Especial de Grado para optar al título de Magister en Historia
Contemporánea de América. He realizado trabajo docente en tres universidades,
Universidad Militar del Ejército Bolivariano, Universidad Central de Venezuela
y Universidad Monteavila.
Publicaciones:
Psicobiografía de Armando Reverón –
Presentación catálogo “Día del artista Abril Mayo 2009” San Felipe, Edo.
Yaracuy
Ponencia: La industria petrolera y su
incidencia en el movimiento obrero en el estado Zulia 1925 – 1936. V Congreso
Internacional de Estudios Históricos, Barquisimeto 2013
Ponencia: Influencia de la exportación de
Cacao en el Nordeste Brasileño 1890 – 1930. IV Jornada de Investigación
Histórica Escuela de Historia
3. ¿Cuándo y cómo nació su vocación como historiadora?
No siempre quise ser historiador, pues tengo
mucha curiosidad de la vida y del mundo en general. Me gusta conocer y estudiar
varias cosas al mismo tiempo. Sin embargo, sí tengo referencias muy cercanas a
la disciplina, y es que mi mamá quiso desde pequeña ser arqueóloga, y mi abuelo
materno fue militar de la armada y nos daba permiso para leer y acceder a los
libros que teníamos en casa. Luego se sentaba conmigo a estudiar, a buscar en
el mapa, en el diccionario, en revistas especializadas… entre los dos formaron
mi pasión, por conocer y por entender el mundo que me rodea. La historia vino a
ser un filtro por la cual esta curiosidad vino a dar cabida a gran cantidad de
temas que envuelven al ser humano.
4. ¿Qué lectura, película-serie, o persona fortaleció
dicha vocación? ¿Fue “discípulo” de algún historiador? ¿Cuál es su historiador preferido y por qué? ¿Qué libro de Historia recomienda y por qué?
Además de mi familia, siempre me acerqué a
las personas mayores, aquellas que “echan cuento” de cosas que habían sucedido
hace tiempo. Una de estas personas fue el artista plástico, curador y escritor,
ex director de la Galería de Arte Nacional, Francisco Da Antonio, con quien
compartir la lectura, Oficio de difuntos de Arturo Uslar Pietri. Me sentaba en
su despacho a conversar sobre la historia y la literatura, de los personajes de
Cipriano Castro y Juan Vicente Gómez y de cómo Uslar Pietri realizó este
magistral retrato literario de sus conflictos y su época. A partir de este
momento atesoré la relación entre narrativa e historia que hasta hoy en día
considero indisoluble.
Fue una grata manera de iniciarme en los
asuntos históricos con mayor seriedad. Recomiendo a aquellos que aún no han
tenido contacto directo con la disciplina, pero que de algún modo siente
curiosidad hacia ella, puedan leer alguna novela cuyo contenido navegue en un
contexto histórico. En la literatura histórica encontramos “ilustraciones” de
la realidad, del conflicto humano, sus pasiones y motivaciones, así que para
aquellos que deseen adentrarse en la disciplina histórica un buen comienzo lo
encontraremos en la literatura.
Entre los historiadores venezolanos a los
que he seguido su obra y la recomiendo están Pedro Grases y Josune Dorronsoro,
quienes trataron en sus investigaciones temas y fuentes que son de mi interés.
5. ¿Cómo fue su
experiencia en el pre y/o postgrado de historia?
Recuerdo mis años de estudiante de historia
con mucho cariño, sobre todo por los profesores con los que me tocó compartir.
Y digo compartir, porque siguen siendo hasta hoy en día verdaderos amigos y
consejeros. Algunos de ellos son la profesora Katy Solórzano, Lorena Puerta,
Ramón Chacón, Julio López, Andrés Sepúlveda, Henrique Nóbrega, entre otros.
Luego, en los estudios de maestría, los profesores María Elena González de
Luca, Alejandro Mendible, y Aura Marina Boadas (Maestría de Letras), hicieron
que me plante orgullosa ante el ejercicio de esta hermosa carrera. No sé si mi
destino es ser eternamente la estudiante de realidades, pero ciertamente mis
mentores y sus enseñanzas son de suma importancia en mi vida, es lo aplico
diariamente en mi trabajo.
6. ¿Cuál es su área o rama de la Historia favorita y
por qué? ¿Cuáles son sus líneas de investigación? ¿Cuál escuela historiográfica sigue y por qué?
Me especializo en historia de América,
tanto en los estudios de pregrado como los de postgrado. Considero que lo que
tiene que ofrecer el continente es tan rico y tan valioso como cualquier otra
región del planeta. Soy americanista, me interesa mirar el continente desde
varios ángulos, repensar nuestra identidad, nuestras dinámicas sociales y la
manera en que nos insertamos en los ritmos mundiales, qué naciones fueron
dominantes en un momento determinado y por qué, cómo influyó sobre el resto...
El americano desde tiempos de emancipación, ha estado en constante búsqueda de
sus raíces, a través de la historia, el arte, de la literatura, de la filosofía,
yo me uno a esta construcción identitaria… Como lectura inicial recomiendo Reflexiones
sobre el concepto de la historia de América, de María Elena González DeLuca.
Este escrito ofrece muy buenas luces de lo que implica el estudio y comprensión
de la historia del continente americano.
7. ¿Cuál fue su primer escrito como historiador o
cuál fue el que más le gustó? ¿A quién se lo dedicó?
Psicobiografía de Armando Reverón –
Presentación catálogo “Día del artista Abril Mayo 2009” San Felipe, Edo.
Yaracuy
Este trabajo lo realicé bajo la tutela de
la profesora Katy Solórzano como un primer intento al acercamiento de trabajo
biográfico. En este caso, la psicobiografía tiene que ver con las motivaciones
de la persona, aquellas que la condujeron a actuar o no de cierta manera. La
enigmática vida y obra de Armando Reverón me llevaron a tomarlo como modelo en
este estudio, que resultó central en la celebración del día del artista en la
ciudad de San Felipe. Lo dediqué a mi hija que apenas era una hermosa noticia
de bienvenida para ese momento.
9. ¿Cuáles son sus ritos cuando se dedica a escribir
sobre historia? ¿Escribes de noche o de día, con música, te acompañas de objetos especiales, lo haces en un lugar específico, etc.?
Cuando encuentro un tema que me interesa,
me empeño en hacer un arqueo de fuentes de manera casi compulsiva… hasta que
encuentre que el tema es viable o no, la inquietud no me abandona. Escribo en
la mañana, pero leo a toda hora (Metro, camioneta, durante el almuerzo…), organizo
la información por secciones de la investigación, ficho a la antigüita (Fichas
grandes, en parte superior izquierda con bolígrafo azul hago la referencia
bibliográfica, con rojo la referencia al dato, con lápiz el dato, cita o
información), y de allí el impulso casi nunca me abandona, al contrario, siento
que hasta que no termino, no puedo estar tranquila. En cuanto a la estructura
de la investigación, me gusta sentarme en un café, plaza, o jardín con mi
respectivo fichero, chocolate o café y me siento a pensar el asunto un par de
horas hasta que vea que la cosa queda completamente clara. No me molesta la
gente a mi alrededor, pero por lo general me gusta trabajar en lugares abiertos
como el Centro de Arte la Estancia…
10. ¿Qué tiempo diario o semanal le dedica a la historia? ¿Qué está leyendo en este momento? ¿Qué lee por lo general?
Todos los días. Bien sea para las clases, o
para algún proyecto de posgrado, o curiosidad personal. Leo cualquier tema de
calidad que tenga que ver con el contexto americano, en este momento estoy
leyendo Yo Totuba, bruja negra de Salem de la escritora Maryse Condé. Esta
novela se ambienta en el Caribe colonial, específicamente entre la isla de
Barbados y luego pasa al contexto norteamericano esclavo. Antes de esto leí, Purgatorio,
de Tomás Eloy Martínez. Esta obra se ambienta en la dictadura militar
argentina.
11. ¿En qué proyectos sobre historia está ahora?
En estos momentos estoy realizando trabajo
de grado Aspectos sociales de la pacificación de Medellín, 1992 – 2014, en el
cual estoy revisando cuestiones relacionadas a los derechos humanos en
Colombia, y profundizando en la metodología de la Historia Reciente, como una
manera de entrenarme en el arte de poder explicar históricamente nuestras
realidades más inmediatas.
12. ¿El historiador debe leer literatura? ¿Qué otras disciplinas debería conocer el historiador?
Definitivamente si. Debe leer literatura
tanto para el cultivo intelectual, como para sensibilizar el estudio histórico.
Una de las grandes críticas dentro de la disciplina es que en cierto momento el
hombre como ser social, se diluye dentro del estudio histórico, la literatura
viene a recordarnos que el ser humano es el protagonista de los hechos que
estudiamos, que amamos, odiamos y deseamos como seres de carne y hueso. Por
otro lado, la libertad de temas que ofrece la literatura es un elemento que
podría añadir creatividad al estudio histórico. De ningún modo digo que la
literatura deba suplantar la historia, sino que la obra literaria contribuye a
“oxigenar” nuestra disciplina.
13. Además de la Historia, ¿tiene otros gustos, placeres o vicios?
La buena literatura, el buen arte, el buen
cine, hacer radio… y el chocolate!
14. ¿Cómo es su relación con las redes sociales e internet engeneral? ¿En qué puede ayudar el internet a la historiografía? (si tiene twitter nos gustaría conocerlo y divulgarlo si le parece).
Siento que hay grandes avances en los
medios de comunicación, la inmediatez del hecho casi instantáneo es abrumadora.
Pienso que el historiador es figura tan pública como cualquier funcionario
ministerial, y que su voz es portadora de alertas que tratan de encarrilar el
devenir social y político de nuestras sociedades. Ahora bien, en este momento
me viene la inquietud y la reflexión entre lo público y lo publicitario, ¿qué
se promociona en las redes, el historiador o su obra?... en este sentido,
siento que hay un desequilibrio y que el acceso al conocimiento histórico
debería ser tan provechoso como el acceso al autor. Las iniciativas como blogs
académicos, audiovisuales, revistas digitales, etc. deberían producirse y promocionarse
de igual manera que lo hace el historiador. Figura y conocimiento deben ser
públicos en igual proporción.
15. ¿Cómo sobrevive (en lo
económico, en lo profesional y en lo espiritual) siendo historiador? ¿Se puede ser historiador en Venezuela?
Es muy difícil sobrevivir de este oficio.
Creo fielmente que la opción para mucho de nosotros historiadores nóveles que
estamos en plena oportunidad de modelar nuestras carreras, es tratar de filiar
la carrera académica con aspectos más prácticos y técnicos según nuestros
gustos. Por ejemplo, trasladar nuestro ámbito de trabajo a la radio, el
editorial, el audiovisual… encontrar otras salidas al conocimiento acordes a
nuestros tiempos. Esto también tiene que ver con educar a un público que por
vivir en una dinámica política y social tan acelerada, no se detiene a sembrar
una memoria histórica… del mismo modo que los autores literarios buscan y
educan a sus lectores, el historiador debe educar y fomentar en la sociedad la
memoria histórica, y esto se hace a través de los medios más inmediatos, las
redes sociales, los medios de comunicación… de allí la importancia de
promocionar por igual el conocimiento histórico tanto como al historiador.
16. ¿Qué profesión u oficio ejercería de no ser historiador?¿Abandonaría su profesión de historiador? ¿Por qué?
Creo que el ser historiador es una
profesión de base, sería imposible desligarme de ella en el ejercicio de
cualquier otro oficio. Me gustaría incursionar en la fotografía, en la
narrativa, en el periodismo y la diplomacia.
17. ¿Para qué sirve la historia? ¿Tiene futuro el estudio de la historia en general y en Venezuela?
Cualquier historia bien sea de Venezuela,
de América o de cualquier parte del mundo, sirve para entender. Mientras exista
la sociedad, existirá la preocupación por entenderse a sí misma, por entender al
otro… entender siempre será necesario.
18. ¿La historia de Venezuela ha sido un fracaso? ¿Qué piensa de nuestro presente?
No creo que sea la historia lo que ha
fracasado, sino el cultivo de la misma en el público en general… creo que hay
todo un trabajo por hacer en la promoción de la historia, no simplemente como
un conocimiento académico, sino como tema de interés público. Nuestro presente
tiene mayor alcance dado no solo por desconocimiento del pasado, sino por
nuestra cultura política, de esperar constante al mesías que va venir a
arreglar nuestras desgracias. Quizás el “fracaso” al que refiere la pregunta
tendría que ser en qué tanto hemos profundizado en este tipo de
comportamientos, y a partir de allí elaborar mejores respuestas.
20. ¿Qué debemos hacer con el culto a Bolívar y la Historia Patria?
Debemos seguir leyendo. Creo que después de
185 años todavía no entendemos con claridad la figura de Bolívar… nuestros
gobernantes la modelan a su antojo y el pueblo se come el cuento. Leer es una
forma de resistencia.
21. ¿Qué recomendaría a los noveles historiadores?
Que no se desmotiven ante el panorama que
pueda estar tomando la disciplina, creo que la actual situación es difícil para
cualquier carrera. Debemos ser creativos y tratar de salir del “claustro
bibliotecario” por el que se nos tiene en el imaginario popular. Al historiador
le toca ser emprendedor y buscar salidas a la producción históricas acordes a
nuestros tiempos.
22. Recomiéndeme más de 2 historiadores noveles y/o jóvenes que deberíamos entrevistar
Katty A. Solórzano
Marcia Peña Prieto
(La próxima semana tendremos a Angel Rafael Lombardi Boscán).
¡Tronco de entrevista!
ResponderBorrarLa leí completa, pero la pregunta que más me llamó la atención fue la nueve, donde le preguntas acerca de sus ritos al trabajar.
¡Felicitaciones!
Me alegra mucho que le haya gustado.
ResponderBorrarUn abrazo.