¿Qué es el chavismo? La impunidad para el terrorismo, la cárcel para los demócratas

Les dejo la nota del Tal Cual sobre las injusticias que se cometen contra el joven demócrata: Julio Rivas.

Julio Rivas
Este joven de 22 años se convierte en el nuevo preso de Hugo Chávez. Líder de un movimiento juvenil en Carabobo, cuyo único delito fue marchar contra la Ley de Educación, ahora es víctima de la justicia que se administra desde Miraflores

Habían transcurrido dos horas desde que finalizó la audiencia en el Tribunal 37 de Control, cuando finalmente la jueza Leidys Azuaje dictó la medida de privación de libertad al estudiante carabobeño Julio César Rivas. Su papá, amigos y abogados rompieron a llorar cuando recibieron la noticia; sin embargo, Rivas permaneció en silencio y luego dijo "eso era lo que yo esperaba".
Su abogado y ahora amigo, Alfonso Granadillo estuvo presente junto con Julio y su papá cuando dieron la sentencia. Manifiesta estar asombrado de la decisión que se tomó y de la reacción del estudiante.
"Nosotros hasta último momento tuvimos esperanzas, pero esa fue la decisión. La entereza de Julio es admirable, yo pensé que se iba a desplomar aquí".
Granadillo llevó anteriormente el caso de Rivas cuando lo detuvieron el pasado 18 de agosto por unas protestas en Valencia y le dictaron una medida cautelar con un régimen de presentación de 60 días. No obstante, piensa que esto no frenará las protestas de los estudiantes y que sólo logrará una reacción contraria.
"Han sido inhumanos los cuerpos represivos del Estado" indicó.
El también director de la organización Juventud Activa Venezuela Unida (JAVU) tiene una hermana menor que padece parálisis y dificultad motora, por lo que sus padres se encontraban en Estados Unidos buscando alternativas de tratamiento para ella. Rivas permanecía solo en el país, hasta el martes de esta semana cuando llegó su papá, Julio Rivas, quien se trasladó lo antes posible para estar con su hijo. Su mamá estará en el país norteamericano hasta que se logre tramitar la visa de su hija.
Rivas padre, también pastor de la Iglesia Evangélica, ha manifestado completo apoyo a su hijo, sobre todo porque en algún momento apoyó al gobierno de turno y ahora se declara contrario a este.
Las condiciones de la familia Rivas han conmovido a gran parte del estado carabobeño, por lo que sus amigos y la Federación de Centro de Estudiantes han permanecido al lado del estudiante. Por ahora, Julio dice sentirse fortalecido y tiene un sólo requisito para seguir luchando: "Lo único que pido es que por favor no me dejen solo", unas de las pocas palabras que atinó a decir luego de la sentencia.
Tomado del Editorial de El Nacional
¿Y cuáles son esos delitos atroces cometidos por un joven de 22 años de edad, que sólo se ha atrevido a hablar de libertad, de democracia, de libre expresión de las ideas y de la posibilidad de un mundo mejor para los venezolanos? ¿Acaso Julio César Rivas se paseaba en Valencia cargado de armas y granadas, como el exalcalde de Caracas, Freddy Bernal, cuando estaba en la clandestinidad? ¿Es, quizás, Julio César Rivas, un ladrón de los dineros públicos como lo es la actual mafia de los petroleros en Venezuela? De estos innobles y groseros delitos mayores no puede ser acusado Julio César Rivas, porque él es un estudiante aplicado a las exigencias de las tareas universitarias, brillante en la presentación de sus pruebas y exámenes académicos, apreciado por sus profesores y puntillosamente honesto. Aquí está su falla porque la oxigenada fiscal general le tiene puesto el ojo a aquellos jóvenes que predican y practican la honestidad, porque esto va en contra de la doctrina general del bolivarianismo.

Nota personal: Acá pueden ver las amenazas y las acciones violentas de la chavista Lina Ron, pero a ella no la mandan para una cárcel de alta peligrosidad como hacen con los demócratas, aunque estos últimos son inocentes; y Lina Ron y muchos de los que han actuado violentamente a la luz pública, pero... están a favor del gobierno, o siguen libres o los mandan a cómodas reclusiones (los pocos que son privados de libertad). Es por ello que en Venezuela no existe ni estado de derecho ni mucho menos eso que llaman: igualdad ante la ley, y hemos pasado a ser, después de Cuba, el país de Iberoamérica con más presos políticos: 47 demócratas tras las rejas al día de hoy (ver aquí).